AFP
Honduras espera retomar este domingo el conteo de votos para definir al ganador de los comicios de hace una semana entre el presidente Juan Orlando Hernández y el opositor Salvador Nasralla, bajo un estado de sitio impuesto para contener violentas protestas contra un supuesto fraude.
El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), David Matamoros, dijo que esperaba este domingo en el organismo a los dirigentes de la izquierdista Alianza de Oposición Contra la Dictadura, que postula a Nasralla, para escuchar sus reclamos sobre supuestas irregularidades en el lento conteo de votos.
Matamoros pretende alcanzar un acuerdo con ellos para revisar 1.006 actas de las votaciones del domingo 26 de noviembre que tienen inconsistencias, como errores en la suma de votos, falta de firmas de los miembros de la mesa de sufragio o borrones.
Sospechas de irregularidades
El expresidente Manuel Zelaya, líder de la alianza opositora, manifestó a UneTV que exige la revisión de al menos 5.174 actas transmitidas al TSE en forma sospechosa y que dieron vuelta al resultado, después de que un primer conteo parcial de votos, del 57% de las actas, daba a Nasralla una ventaja de 5 puntos sobre Hernández.
Esa primer resultado parcial fue divulgado la madrugada del lunes, 10 horas después del cierre de mesas de votación.
Sin embargo, cuando comenzaron a actualizarse las cifras el martes, la ventaja fue cayendo, y Hernández se puso al frente del conteo el miércoles, después de una serie de interrupciones en sistema de cómputo del TSE, una de ellas de cinco horas.
Tal situación provocó airados reclamos de fraude que desataron violentas protestas en toda Honduras, con saqueos de negocios. Las sospechas de fraude se han visto estimuladas porque Hernández se postuló a un nuevo mandato amparado en un cuestionado fallo judicial, a pesar de que la Constitución hondureña prohíbe la reelección.
El conteo se paralizó el viernes con 94,45% de las mesas escrutadas, que daban una pequeña ventaja a Hernández, del derechista Partido Nacional, de 42,92% sobre 41,42% de Nasralla.
El magistrado suplente del TSE, Marco Ramiro Lobo, mostró su extrañeza con el cambio de tendencia en la votación.
"El sistema se cayó y lo extraño es que la tendencia que teníamos se revirtió" beneficiando "a un solo candidato", dijo Lobo la noche del sábado a UneTV, en alusión a que las tendencias de votación de todos los demás candidatos se mantuvieron tras las interrupciones.
Ante ello, el expresidente Zelaya, derrocado en el golpe de estado de 2009, consideró que "si es necesario revisar las 18.000 actas, pues hagámoslo".
Dijo que en tres departamentos poco poblados del oeste del país, incluyendo Lempira, donde nació Hernández, aparece un volumen de votos exagerado por encima de la media nacional, lo que llama a sospechas.
Matamoros insistió en revisar únicamente 1.006 actas que tienen inconsistencias, de 18.000 en total.
"El que sale electo de esta forma ilegal no podría gobernar a un pueblo (...). Nadie debe obediencia a un gobierno usurpador, así dice la Constitución", sentenció Zelaya, quien convocó a una nueva jornada de protestas este domingo.
"Desobediencia civil"
"Haría un escalada de desobediencia civil, no quisiera yo gobernar con el 70% de la gente que lo rechaza y está en la calle, no podría establecerse un gobierno en esas condiciones", expresó el exmandatario.
Las protestas que estallaron el miércoles con barricadas de neumáticos incendiados en todo el país y saqueos en negocios en las principales ciudades fueron contenidas con un estado de sitio, con toque de queda nocturno, decretado el viernes por el presidente Hernández.
Al menos una persona murió y decenas resultaron lesionadas en medio de enfrentamientos entre manifestantes con policías y militares, que usaron bombas de gases.
Pero los hondureños encontraron nuevas formas de protestar en medio del toque de queda.
La noche del sábado se escuchó el sonido de cacerolas, petardos y bocinas de vehículos en los barrios de las ciudades e incluso en los lugares más recónditos del país, según reportes en redes sociales.
En algunas colonias de Tegucigalpa, como Centroamérica Oeste, opositores salieron a las calles con antorchas encendidas sonando cacerolas y gritando: "Fuera JOH", por las iniciales de Hernández.
La Constitución hondureña no prevé una segunda vuelta, por lo que el TSE proclamará como nuevo presidente al candidato más votado, es decir, a Hernández, de 49 años, o a Nasralla, presentador de televisión de 64 años.