Un hombre que secuestró, violó y mató a su exnovia en 1993 en Estados Unidos fue ejecutado este miércoles, en la primera aplicación de la pena capital en más de cuatro años en el estado de Georgia (sur).
Willie Pye, de 59 años, fue ejecutado mediante inyección letal a las 23H03 locales (03H03 GMT del jueves) en una prisión de Jackson, Georgia.
La Corte Suprema de Estados Unidos y la Junta Estatal de Indultos y Libertad Condicional rechazaron una petición de clemencia de última hora presentada por Pye.
En su argumentación a favor de la clemencia, la defensa afirmó que Pye padece una discapacidad intelectual -con un coeficiente intelectual de 68- y que vivió una infancia traumática de "profunda pobreza, abandono, violencia constante y caos en su hogar familiar".
Además, según sus apoderados, estuvo mal representado en el juicio por un "abogado de oficio racista y sobrecargado de trabajo", que ya falleció.
Pye, un afroamericano de 59 años, fue condenado a la pena capital en 1996 por el crimen de Alicia Yarbrough, una mujer con la que tenía relaciones esporádicas y a la que raptó y violó junto con dos cómplices.
La sentencia había sido anulada en 2021 por una corte de apelaciones que consideró que no tuvo una buena defensa pública, pues su abogado no invocó que presentaba señales de dicha discapacidad intelectual. Pero la condena a muerte le fue reimpuesta en 2022.
Pye no grabó una declaración final, pero sí aceptó una oración, dijo el Departamento Penitenciario de Georgia en un comunicado.
Esta es la tercera ejecución que se realiza este año en Estados Unidos.
La pena capital ha sido abolida en 23 estados del país norteamericano y en otros seis -Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tenessee- ha quedado suspendida.
Sin embargo, el año pasado se realizaron 24 ejecuciones en Estados Unidos, la mayor parte por inyección letal.
