Maxwell Berry, un joven de 22 años, fue amarrado con cinta adhesiva al asiento que utilizaba en un avión tras agredir a un miembro de la tripulación, manosear a dos asistentes de cabina y lanzar insultos a otros pasajeros.
El hecho se registró el pasado 31 de julio, al interior de una aeronave de la empresa Frontier, que viajaba de Filadelfia a Miami, Estados Unidos.
El sujeto había estado bebiendo alcohol dentro del avión y en un momento derramó su trago encima, por lo que fue al baño a cambiarse y al momento de volver a su asiento sin camisa le tocó los senos a dos asistentes de cabina.
Sin embargo, no paró ahí, pues el reporte de la policía indicó que el joven deambuló por el pasillo del avión por unos 15 minutos. Y cuando un miembro de la tripulación se acercó para pedirle que regresara a su asiento, fue golpeado por Maxwell Berry.
Tras esto, el mismo auxiliar de vuelo lo amarró al asiento con la ayuda de otros pasajeros, mientras que Berry lanzaba improperios al aire. "¡Mis padres valen más de dos malditos millones de dólares!", gritó.
El hecho fue grabado y posteriormente difundido en redes sociales.
"Esta será para siempre la experiencia más deshumanizante de toda mi vida. Mucha gente se rio y se burló de mí porque el personal de una aerolínea profesional me maltrataba", cuestionó el hombre en redes sociales.
Según recogieron medios locales, la policía de Miami-Dade acusó a Berry de tres delitos menores de agresión y se abrió una investigación para esclarecer aún más los hechos de parte de la aerolínea.