AFP
El gobierno español busca retirar de "inmediato" los restos del dictador Francisco Franco de su mausoleo en el Valle de los Caídos, afirmó su presidente, el socialista Pedro Sánchez, en una entrevista al diario El País publicada este domingo.
Llegado al poder el 1 de junio mediante una moción de censura que desbancó al conservador Mariano Rajoy, Sánchez advirtió por otro lado que la "crisis en Cataluña" por la apuesta independentista tardará años en resolverse y requerirá "generosidad" de las partes.
"Queremos que el traslado de los restos de Franco sea inmediato. Creo que una democracia madura como la nuestra, europea, no puede tener símbolos que separen a los españoles", subrayó Sánchez.
"Este Gobierno va a cumplir con el mandato del Congreso de los Diputados de 2017 de convertir el Valle de los Caídos en un lugar de reconciliación", apuntó.
Sánchez se refería a la amplia mayoría de diputados (198 sobre 350) que exigió en 2017 en vano el traslado de los restos al gobierno conservador de Rajoy.
Vencedor de la sangrienta Guerra Civil (1936-1939), Franco está enterrado en el Valle de los Caídos, un complejo monumental que él mismo ordenó construir a 50 km de Madrid.
Además de Franco, dictador desde 1939 hasta su muerte en 1975, en el mausoleo se encuentran los restos de más de 33.000 víctimas de la Guerra Civil -del bando nacional y el bando republicano-, que fueron trasladados ahí en ocasiones sin avisar a sus familias.
A cuatro décadas de la muerte del dictador, la cuestión de la memoria histórica todavía divide a España.
En cuanto a Cataluña, que el año pasado fue escenario de una fallida declaración de secesión de España, Sánchez dijo a El País que la crisis política "no se va a resolver en un año ni en dos, ni en cinco ni seis".
"Va a necesitar de generosidad y de esfuerzo de todas las partes durante la próxima década. (...) De normalización en primera instancia y, en segundo lugar, de acuerdo", dijo Sánchez, quien se reunirá el 9 de julio en Madrid con el nuevo presidente catalán, el independentista Quim Torra.
Sánchez se encontró por primera vez con Torra el viernes pasado en la inauguración de los Juegos del Mediterráneo, en la ciudad catalana de Tarragona, un evento al que también asistió el rey Felipe VI, quien fue recibido con protestas de separatistas.
La crisis "tiene que ser resuelta desde el ámbito político, y no desde el ámbito judicial. Pero a cambio exijo que haya esa voluntad de reconstruir la confianza por parte del Gobierno de Cataluña", agregó Sánchez.