El gobierno de Mauricio Macri en Argentina anunció modificaciones a una polémica Ley de Medios que fue aprobada durante la gestión de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015).
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, dijo en conferencia de prensa que los cambios se realizarán a través de un decreto.
“Hoy se termina la guerra contra el periodismo y empieza el siglo XXI en lo que tiene que ver con las comunicaciones", afirmó Peña.
La Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual –más conocida como Ley de Medios- fue aprobada en 2009 y redujo la cantidad de licencias en manos de un solo propietario.
También dividió el espacio radioeléctrico en tres partes iguales entre el Estado, el sector privado y las organizaciones sin fines de lucro, y creó un nuevo ente regulatorio: la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación (Afsca), entre otras disposiciones.
Una de las principales modificaciones en el área implementadas por el nuevo gobierno es la disolución de la Afsca, que será reemplazada por un nuevo organismo, el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom).
El Enacom también regulará las telecomunicaciones, sector que estaba regulado desde 2014 por la Autoridad Federal de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Aftic), organismo que también será disuelto.
“Guerra”
Según Peña, tanto la Afsca como la Aftic eran utilizados como “herramientas políticas” por el gobierno de Fernández, en medio de "una guerra” contra el periodismo independiente.
En cambio el expresidente de la Afsca, Martín Sabbatella, quien fue removido por el nuevo gobierno, dijo que Macri “odia la democracia” y señaló que “la única guerra es la de ellos contra las instituciones”.
También criticó que las modificaciones se hicieran a través de un decreto.
Según el kirchnerismo, la Ley de Medios tuvo como objetivo "desconcentrar y desmonopolizar" el mercado mediático. Para sus detractores, fue un intento de quitar poder al principal multimedios del país, el Grupo Clarín, de línea opositora.
Peña anunció que se convocará a una comisión bicameral para la redacción de una nueva Ley de Medios, que incluya a las telecomunicaciones.
No mencionó cambios al tope impuesto por la actual ley sobre la cantidad de licencias de radio y televisión en manos de un mismo dueño, aunque sí dijo que la regulación ya no afectará a la TV por cable.
