En medio de la guerra en Ucrania, la migración de rusos en la frontera de Finlandia ha estado en el debate internacional. Es en este contexto que una severa medida podría concretarse.
En específico, el Gobierno de Finlandia ha propuesto construir una valla metálica en los tramos más vulnerables de su frontera con Rusia.
En un comienzo, la medida fue de la Guardia de Fronteras, y al ser presentada a los políticos fue respaldada por diversos grupos de parlamentarios en una reunión entre el gobierno finlandés con líderes de los partidos.
“Se trata de poder asegurarnos que la frontera está bien vigilada y de ser capaces de anticiparnos a lo que pueda ocurrir en ella”, afirmó la primera ministra finlandesa, Sanna Marin.
La valla tendrá concertinas (alambre con pequeñas cuchillas) y cámaras de videovigilancia en los tramos de mayor riesgo.
En total, la valla tendrá una extensión de entre 130 y 260 kilómetros, lo que abarca entre el 10% y el 20% de los 1.340 kilómetros de frontera.
De manera inicial, se construirá un tramo de prueba de aproximadamente tres kilómetros, pero en total se estima que las obras se realicen en un período de cuatro años.