El gobierno de Rusia inició este viernes una investigación contra el líder del grupo mercenario ruso Wagner, Yevgeny Prigozhin.
El Servicio Federal de Seguridad (FSB) del Kremlin señaló a Prigozhin como incitador de una rebelión, después de que éste acusara al ejército ruso de lanzar un mortal ataque con misiles contra sus tropas.
El jefe de Wagner proclamó que el "mal" en el liderazgo militar de Rusia debe ser detenido y prometió "marchar por la justicia".
Las autoridades denegaron la marcha y le exigieron que detenga las "acciones ilegales".
La lucha interna, al rojo vivo
El presidente, Vladimir Putin, fue informado de la situación y se están tomando todas las medidas necesarias, declaró su portavoz.
Vladimir Putin está viendo abrirse cada vez más este frente interno.
El nuevo choque entre el gobierno y los mercenarios supone una importante escalada de las luchas internas dentro de Rusia.
El grupo Wagner es una organización paramilitar que pelea junto a las fuerzas rusas en Ucrania.
Sin embargo, en los últimos meses Prigozhin ha aumentado sus críticas al liderazgo militar de Moscú.
En un mensaje de audio publicado en la plataforma de redes sociales Telegram, afirmó que "el mal que porta el liderazgo militar ruso debe ser detenido".
"Aquellos que mataron a nuestros muchachos y acabaron con decenas de miles de vidas de soldados rusos [en la guerra en Ucrania] serán castigados", sentenció.
"Les pido que no se resistan. Cualquiera que lo haga será considerado una amenaza y destruido. Esto aplica a cualquier punto de control y aviación en nuestro camino.
"El poder presidencial, el gobierno, la policía y la guardia rusa funcionarán como de costumbre", indicó.
Wagner ha acusado en varias ocasiones a Moscú de no hacer lo suficiente para evitar muertes de sus mercenarios. En la foto, tumbas de soldados de Wagner muertos en la guerra de Ucrania.
Y agregó: "esto no es un golpe militar, sino una marcha por la justicia. Nuestras acciones no interfieren con las tropas de ninguna manera".
Críticas a la invasión de Ucrania
Medios estatales de Moscú informaron que el FSB abrió un proceso penal contra Prigozhin, a quien acusa de "llamar a una rebelión armada".
El Kremlin también anunció que "se están tomando las medidas necesarias", según la agencia de noticias rusa Interfax.
El Ministerio de Defensa ruso indicó en un comunicado que "todos los informes de Prigozhin difundidos en las redes sociales" sobre los ataques rusos a los campamentos de Wagner "no son ciertos y son una provocación informativa".
Esto ocurre después de que en mayo se publicara un vídeo en el que el líder de Wagner, rodeado por los cuerpos de sus tropas, reprendía al ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, así como al Jefe del Estado Mayor General, Valerii Gerasimov, por no suministrarles suficientes municiones.
Y este viernes Prigozhin aseveró que la guerra en Ucrania se inició "para que Shoigú pudiera convertirse en mariscal".
"El Ministerio de Defensa está tratando de engañar al público, engañar al presidente, y contar una historia de que hubo una agresión loca por parte de Ucrania; que, junto con todo el bloque de la OTAN, Ucrania planeaba atacarnos", alegó.