Eyvi Ágreda, la joven peruana de 22 años que resultó con quemaduras en el 60% de su cuerpo luego de que un sujeto le arrojara gasolina y prendiera fuego en Miraflores—un distrito acomodado de la capital peruana— falleció este viernes en el hospital Guillermo Almenara de EsSalud, donde se encontraba internada.
De acuerdo a Andina la joven no resistió el tratamiento al que era sometida después de que Carlos Javier Hualpa Vacas la atacara brutalmente el 24 de abril pasado, cuando viajaba en un bus de transporte público.
"La paciente estuvo recibiendo atención médica especializada en el Servicio de Cuidados Intensivos durante 38 días y también fue sometida a varias intervenciones quirúrgicas en el Servicio de Cirugía Plástica y Quemados, pero no resistió a un 'shock' séptico", indica un comunicado de EsSalud.
Luego de ser detenido por la Policía Nacional, Hualpa confesó la terrible agresión, planeada tras verse rechazado en sus intenciones amorosas.
De acuerdo con su abogado defensor, Mario Arriba, el agresor no tenía intención de matarla, sino “solo desfigurarla", y que un mes antes había comprado la gasolina, pero que no tenía valor para ejecutar su plan.
El 4 de mayo, 35 efectivos del Ejército, entre cadetes y oficiales, donaron sangre para Eyvi, debido a la gran cantidad de cirugías que debía enfrentar para superar las quemaduras que sufrió.
Durante su permanencia en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), fue sometida a diversas operaciones quirúrgicas para retirarle la piel necrosada producto de las quemaduras. Incluso se le trasplantaron porciones de piel de cerdo en las extremidades.
Carlos Hualpa Vacas, responsable del ataque que acabó con la vida de Eyvi Ágreda, se encuentra privado de su libertad luego de que un juzgado dictara contra él nueve meses de prisión preventiva por el delito de tentativa de feminicidio.
