Facebook dio a conocer este miércoles nuevas reglas contra ataques en línea a periodistas, activistas y celebridades, mientras el gigante de las redes sociales lucha contra una crisis por los daños potenciales de sus plataformas.
La jefa de seguridad de Facebook, Antigone Davis, anunció nuevas políticas de protección. "No permitimos la intimidación y el acoso en nuestra plataforma, pero cuando sucede, actuamos", advirtió.
Facebook amplió su rango de "ataques" prohibidos a figuras públicas para incluir una gama de imágenes sexuales o degradantes de sus cuerpos.
Davis, quien defendió el trabajo de la compañía en una audiencia ante los legisladores, recalcó que "ataques como estos pueden convertir la apariencia de una figura pública en un arma".
Facebook también agregó periodistas y defensores de derechos humanos a la lista de personas consideradas figuras públicas por su trabajo.
Las nuevas políticas incluyen obstaculizar los esfuerzos coordinados con el fin de usar múltiples cuentas para acosar o intimidar a personas consideradas en mayor riesgo de daño en el mundo real, como los disidentes del gobierno y las víctimas de tragedias violentas.
Davis dijo que Facebook también comenzará a eliminar "redes opositoras" y redes vinculadas al estado que "trabajan juntas para acosar o silenciar a las personas", como los disidentes.
"Eliminamos el contenido que viola nuestras políticas y deshabilitamos las cuentas de las personas que infringen repetidamente nuestras reglas", escribió.
La compañía se ha enfrentado a una tormenta de críticas y a una audiencia en el Senado desde Frances Haugen, extrabajadora de la empresa, filtró estudios internos que mostraban que Facebook sabía que sus sitios podrían ser dañinos para la salud mental de los jóvenes.
La denunciante alegó que la red social líder anteponía las ganancias a la seguridad de sus usuarios.
Los documentos filtrados por Haugen, que sustentaron una serie de historias mordaces del Wall Street Journal, han alimentado una de las crisis más graves de Facebook hasta la fecha.
En su testimonio, Haugen señaló los riesgos de que las plataformas del gigante de las redes sociales estén alimentando la división política y la autoinsatisfacción, que es particularmente peligrosa para los jóvenes.
Haugen no ha claudicado en su propósito de pedir a las autoridades que regulen la red frecuentada diariamente por cerca de tres mil millones de personas en todo el mundo.
Los legisladores europeos han invitado a Haugen a una audiencia y también tiene programada una reunión con la junta supervisora de Facebook, un organismo semiindependiente responsable de evaluar las políticas de contenido de la red.
Los documentos filtrados y el testimonio de Haugen han provocado un fuerte rechazo de Facebook, pero su director ejecutivo, Mark Zuckerberg, no ha dicho públicamente si aceptará una invitación del Senado para responder a sus preguntas.