La muerte de dos hombres negros a manos de la Policía y el posterior tiroteo en Dallas donde cinco agentes fueron abatidos por un francotirador que actuó en venganza, han provocado un resurgimiento de las tensiones en Estados Unidos. Atento a ello, el Presidente de ese país, Barack Obama, hizo un llamado este sábado a evitar las divisiones y pidió a sus compatriotas no creer que el país está dividido en facciones.

“Pese a lo dolorosa que ha sido esta semana, estoy plenamente convencido de que Estados Unidos no está tan dividido como han dicho algunos”, dijo Obama desde Varsovia, donde asistió a la cumbre de la OTAN. “Estadounidenses de todas las razas y procedencias están indignados por los ataques inexcusables contra la policía (…) Eso incluye a los manifestantes, incluye a las familias”, dijo el jefe de Estado.

Del mismo modo, los estadounidenses están “tristes” por la muerte de Alton Sterling y Philando Castile, ambos tiroteados a quemarropa por agentes blancos. “Cuando se empieza a sugerir que de algún modo hay una enorme polarización y hemos vuelto a la situación de la década de 1960, eso simplemente no es verdad. No hay disturbios y la Policía no está actuando contra la gente que protesta pacíficamente”, defendió Obama.

No representa a nadie

“Hay pena, ira, confusión sobre los próximos pasos, pero también hay unidad a la hora de reconocer que no es así como queremos que funcionen nuestras comunidades. Esto no es lo que queremos ser como estadounidenses”, afirmó el Mandatario, quien hizo un llamado a “reflexionar y asegurarnos que nuestra retórica es constructiva”. Al mismo tiempo, pidió dejar de considerar como “irrelevante” el problema de la falta de control de armas en el país.

Por otro lado, Obama sostuvo que el exsoldado afroamericano Micah Xavier Johnson, quien fue el responsable de la muerte de cinco policías en Dallas, era un “individuo demente”. “El demente que realizó los ataques en Dallas no representa a los afroamericanos, como tampoco el atacante de Charleston es un representante de los estadounidenses blancos, ni los atacantes de Orlando o San Bernardino lo son de los estadounidenses musulmanes”, dijo.

Obama tiene previsto visitar Dallas a principios de la próxima semana, y adelantó que también invitará a la Casa Blanca a activistas, policías y otros actores implicados en las tensiones para identificar "acciones constructivas que puedan marcar una diferencia”.

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