Estados Unidos abrirá a "inicios de noviembre" sus fronteras terrestres con México y Canadá a los viajeros vacunados contra el COVID-19 que ingresen por motivos considerados no esenciales, anunció este miércoles un alto funcionario de la Casa Blanca.
El funcionario afirmó en una conferencia telefónica que la fecha precisa de entrada en vigor de la nueva regulación será anunciada "en los próximos días" para esos viajes por vía terrestre, así como para los viajes internacionales por avión, sometidos al mismo calendario y para los cuales la vacunación obligatoria había sido anunciada el 20 de septiembre.
"Irán de la mano", según la fuente de la Casa Blanca.
Frente a la pandemia, Estados Unidos cerró sus fronteras desde marzo de 2020 para millones de viajeros provenientes en particular de la Unión Europea, Reino Unido o China, más tarde de India o Brasil. Pero también para visitantes que llegan por tierra desde Canadá y México.
La restricción ha provocado situaciones personales dolorosas y perjuicios económicos.
Respecto al cruce terrestre de fronteras, la fuente dijo que el nuevo sistema se implementaría en "dos fases".
Inicialmente, se requerirán vacunas para viajes "no esenciales", como los de turismo o para visitar a familiares, y el requisito de vacunación no se aplicará a los viajes considerados "esenciales", que siempre han sido permitidos.
Para la segunda fase, desde "principios de enero" de 2022, todos los viajeros deben estar completamente vacunados sin importar el carácter del viaje.
Esto dejará "tiempo suficiente" para que se vacunen, por ejemplo, los conductores de vehículos pesados que tienen razones profesionales de peso para cruzar la frontera, explicó la Casa Blanca.
La fuente indicó que las restricciones vigentes para estas fronteras terrestres, que expiran el 21 de octubre, serían prorrogadas una vez más hasta la fecha de entrada en vigor del nuevo dispositivo.
¿Qué vacunas?
Consultado sobre las vacunas que permitirán el ingreso al territorio, el alto funcionario se refirió a indicaciones recientes de las autoridades sanitarias estadounidenses.
Los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC), la principal agencia federal de salud pública, ha "informado a las aerolíneas que todas las vacunas aprobadas por la FDA (la Agencia de Medicamentos de los Estados Unidos) y la Organización Mundial de la Salud se aceptarían para los viajes aéreos.
"Será igual para los viajes terrestres", anticipó el alto funcionario, y precisó que también se aceptaría la vacuna AstraZeneca, que no se administra en Estados Unidos.
La fuente aclaró que el levantamiento de las restricciones solo afectaría a las entradas legales por tierra en el territorio.
Confirmó que el "Título 42", la controvertida ley que permitió a la administración Trump y luego a la administración Biden deportar a personas irregulares por razones de salud, desde el inicio de la pandemia, seguirá aplicándose.
Este texto, criticado por asociaciones porque restringiría particularmente el derecho de asilo, fue invocado por la Casa Blanca para expulsar masivamente a los haitianos que se habían reunido recientemente en la frontera con México.
Respecto al transporte aéreo, el alto funcionario dijo que la administración de Biden todavía debe finalizar el procedimiento, en particular todo lo que implica el rastreo de personas que ingresan al territorio y las pruebas que se realizarán a los viajeros.