Un lapsus vivió el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Este miércoles confundió los estados bálticos de Europa con los Balcanes, y acusó a los líderes de los primeros por iniciar guerras en la década de 1990 que llevaron a la desintegración de Yugoslavia.
El error, que cometió en una reunión en la Casa Blanca con Dalia Grybauskaitė de Lituania, Kersti Kaljulaid de Estonia y Raimonds Vējonis de Letonia en abril, fue revelado por el diario francés Le Monde.
Según este medio, los líderes quedaron sorprendidos por la acusación del Presidente, y les tomó un minuto darse cuenta de que había confundido a los Balcanes y los Bálticos.
Los estados bálticos se encuentran en el norte de Europa, en la costa este del mar Báltico.
En cambio, y alrededor de 1.600 kilómetros de distancia, se encuentra la región de los Balcanes en el sureste de Europa. Comprende Croacia, Bosnia-Herzegovina y Serbia. Gran parte de la región se incorporó al estado de Yugoslavia, que se convirtió en un estado socialista después del derrocamiento de las fuerzas de ocupación alemanas después de la Segunda Guerra Mundial.
En la década de 1990, Yugoslavia se desintegró y la región se dividió en una serie de guerras civiles, que culminaron con la guerra de Kosovo de 1998-1999.
El error de Trump es quizás más sorprendente dado que su esposa, Melania, nació en Eslovenia, un estado que formó parte de Yugoslavia hasta 1991.
En todo caso, no se trata del primer error de este tipo cometido por el mandatario. En una reunión con líderes africanos habló de "Nambia" (no se sabe si hablaba de Namibia, Gambia o Zambia), mientras que en otra habló del "golfo árabe" queriendo referirse al "golfo pérsico".