AFP

El rey Felipe VI de España instó este domingo al nuevo Parlamento catalán, donde los independentistas obtuvieron mayoría, a respetar la "pluralidad" de la región y evitar un nuevo "enfrentamiento", en referencia a la crisis por su tentativa de secesión.

En su tradicional discurso de Navidad televisado, el monarca advirtió al Parlamento recién electo que debe "afrontar los problemas que afectan a todos los catalanes, respetando la pluralidad y pensando con responsabilidad en el bien común de todos".

"El camino no puede llevar de nuevo al enfrentamiento o a la exclusión, que –como sabemos ya– solo generan discordia, incertidumbre, desánimo y empobrecimiento moral, cívico y –por supuesto– económico de toda una sociedad", indicó Felipe VI en su mensaje grabado en un salón en el Palacio de la Zarzuela, con las banderas de España y de la Unión Europea de fondo.

El rey habló tres días después de las elecciones en Cataluña, en las que los partidos independentistas obtuvieron un 47,5% de los votos pero mayoría absoluta en escaños, como colofón de la peor crisis política en décadas en España.

Tras un referéndum de autodeterminación organizado el 1 de octubre pese a la prohibición de la justicia, y semanas de manifestaciones a favor y en contra de la secesión, el Parlamento catalán proclamó la república catalana el 27 de octubre, aunque esta no llegó a materializarse.

El gobierno central de Mariano Rajoy aplicó un hasta entonces nunca usado artículo de la Constitución española, el 155, para tomar el control de la región, destituir al ejecutivo catalán, disolver el Parlamento y convocar las elecciones del 21 de diciembre.

Palabras amables

En pleno desafío independentista, el 3 de octubre, el rey Felipe VI había cargado contra los líderes secesionistas acusándolos de "deslealtad", al tiempo que llamó a "los legítimos poderes del Estado" a "asegurar el orden constitucional y el normal funcionamiento de las instituciones".

Ahora, en su mensaje de Navidad, el monarca hizo una firme advertencia contra una nueva pugna, pero también tuvo palabras amables con Cataluña.

Las autoridades catalanas deben propiciar que "renazca la confianza, el prestigio y la mejor imagen de Cataluña; y a que se afirmen los valores que la han caracterizado siempre [...]: su capacidad de liderazgo y de esfuerzo, su espíritu creativo y vocación de apertura, su voluntad de compromiso, y su sentido de la responsabilidad", agregó el rey.

En su cuarto mensaje de Nochebuena desde que asumió la jefatura del Estado en 2014, insistió en que España es "hoy una democracia madura, donde cualquier ciudadano puede pensar, defender y contrastar, libre y democráticamente, sus opiniones y sus ideas; pero no imponer las ideas propias frente a los derechos de los demás".

El viernes, Rajoy, cuyo Partido Popular fue el gran perdedor en las elecciones en Cataluña, avisó que el nuevo gobierno catalán tendrá que cumplir la ley y abandonar "las decisiones unilaterales".

Aunque los comicios fueron ganados por el partido antiindependentista Ciudadanos, las listas separatistas sumaron mayoría. Ahora deben enfrentar el reto de formar gobierno con sus principales líderes investigados por rebelión y sedición por la apuesta de separarse de España, algunos en la cárcel y otros huidos en el extranjero.

El presidente catalán cesado Carles Puigdemont, al frente de la lista independentista más votada, insistió desde Bruselas en un referéndum de autodeterminación para Cataluña, dejando en el aire su regreso al país, donde le esperaría la cárcel.

Rajoy rechazó el viernes una oferta de Puigdemont de reunirse en el extranjero.

Publicidad