Siguiendo la estela del mar Mediterráneo, las aguas del océano Atlántico Norte batieron esta semana un récord diario de temperatura máxima, algo que hasta ahora solía suceder en septiembre, según datos preliminares que demuestran las olas de calor marinas que azotan el planeta.
Este récord impacta porque llega temprano, según la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica estadounidense (NOAA) que los registra desde comienzos de los 80.
"Según nuestro análisis, la temperatura promedio récord de la superficie del mar en el océano Atlántico Norte es de 24,9 °C" el miércoles, declaró este viernes a la AFP Xungang Yin, científico de los Centros Nacionales de Información Ambiental de la NOAA.
Se tardará unas dos semanas en verificar estos datos, aún considerados provisionales, precisó.
El récord anterior data del año pasado, al comienzo de septiembre, con una temperatura de 24,89 °C, dijo Xungang Yin.
"En cuestión de días"
Las aguas del mar Mediterráneo también batieron este lunes su récord de calor, con una temperatura mediana de 28,71°C, anunció el principal centro de investigación marítima español, que también comenzó a recabar datos en la década de 1980.
Estos científicos privilegian la temperatura mediana en lugar de la media o promedio (28,40 °C el lunes) porque se ve menos afectada por las temperaturas extremas observadas en puntos aislados del Mediterráneo, explicaron.
Se espera que la temperatura de la superficie de las aguas del Atlántico Norte "siga aumentando durante el mes de agosto", advirtió Xungang Yin, por lo que se prevé un nuevo récord.
La temperatura de 24,9°C es "más de un grado más cálida" de lo normal, según un promedio calculado entre 1982 y 2011, señaló.
Desde marzo, que es cuando el Atlántico Norte comienza a calentarse después del invierno, las temperaturas han sido en general superiores a las de años anteriores, con una diferencia más pronunciada durante las últimas semanas.
El Atlántico Norte se convierte así en un punto de observación del sobrecalentamiento de los océanos del planeta bajo el efecto del cambio climático provocado por los gases de efecto invernadero.
El observatorio europeo Copernicus, que utiliza una base de datos diferente a la de la NOAA, afirmó el viernes a la AFP que había registrado una temperatura de 24,70°C el 26 de julio.
Esto "permanece por debajo del récord de septiembre de 2022", que fue de 24.81°C en su base de datos ERA5, que se remonta a 1979, declaró un portavoz de Copernicus.
Pero "no cabe duda de que el récord de principios de septiembre de 2022 se batirá este verano" y en "cuestión de días", añadió.