Un ambicioso plan presentó Inglaterra dentro de sus políticas públicas: Que de aquí a 11 años, el país esté libre de tabaco.
Así lo señala el libro verde dado a conocer por las autoridades británicas esta semana, que lleva por nombre "Avanzando en nuestra salud: prevención en la década de 2020".
Este plan incluye un ultimátum a la industria de los cigarros “para que fumar tabaco quede obsoleto para 2030, con ello los fumadores deberán renunciar a ello o trasladarse a productos con riesgo reducido como cigarros electrónicos", precisa el documento.
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Ya en 2007, se decretó la prohibición de fumar en lugares públicos, mientras que otras propuestas de 2017 generaron una disminución en la tasa de los fumadores, según destaca The Independent.
"Gracias a nuestros esfuerzos, ahora tenemos una de las tasas de fumadores más bajas de Europa con menos de uno de cada seis adultos fumando", señala el informe que propone esta nueva política británica.
