AFP
Un responsable europeo sobre el medio ambiente declaró el sábado que Estados Unidos aparentemente estaba suavizando su postura ante el Acuerdo de París sobre cambio climático, pero la Casa Blanca rápidamente lo negó.
El cometario lo hizo el responsable europeo en una reunión en Montreal de los ministros del medio ambiente de 30 países para avanzar en el Acuerdo de París, del cual el presidente estadounidense Donald Trump se retiró en junio.
En esta cita, a la que asistió un observador de Washington, Estados Unidos "indicó que no iba a renegociar el Acuerdo de París pero que iba a revisar los términos en los que podría comprometerse bajo el acuerdo", dijo el comisario europeo sobre el clima, Miguel Arias Cañete.
La próxima semana, las reuniones que se realizarán al margen de la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York permitirán verificar con los representantes estadounidenses "cual es su verdadera posición", añadió Arias Cañete, destacando que lo dicho por el observador en Canadá "es diferente del que escuchamos del presidente Trump".
Casa Blanca: "no hay cambios"
El observador estadounidense no estuvo inmediatamente disponible para hacer un comentario, pero la Casa Blanca insistió en que Estados Unidos se retirará del Acuerdo de París si no hay términos más favorables.
"No ha habido cambios en la posición de Estados Unidos sobre el Acuerdo de París", dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, en una declaración enviada por correo electrónico.
"Como el presidente lo dejó abundantemente claro, Estados Unidos se retira a menos que se cambien los términos a unos más favorables con nuestro país", añadió la portavoz de Trump.
Convocada por Canadá, la Unión Europea (UE) y China, esta conferencia se celebra 30 años después de la firma del Protocolo de Montreal para la protección de la capa de ozono, "un acuerdo internacional histórico", según la ministra canadiense de Cambio Climático, Catherine McKenna.
Los asistentes a la cita de Montreal nos "comprometimos a la plena implementación del Acuerdo de París. Todos concordaron en que el medio ambiente y la economía van juntos, que ellos están vinculados. Uno no puede hacer crecer la economía sin proteger el ambiente", dijo la ministra al final de la reunión.
"Los cambios son reales, los fenómenos meteorológicos extremos son más frecuentes, más potentes y más destructivos", añadió McKenna, poniendo como ejemplo la situación de "los niños de Barbuda que no tienen ni escuela" tras el paso del huracán Irma, que devastó esta isla del Caribe hace una semana.
A la cita concurrieron más de la mitad de los miembros del G20, así como algunas naciones más vulnerables al cambio climático, desde islas en riesgo de quedar sumergidas, como las Marshall y Maldivas, a los empobrecidos Malí y Etiopía.
Casi 200 países se comprometieron a fines de 2015 en París a limitar o reducir sus emisiones de dióxido de carbono con el objetivo de limitar el aumento de la temperatura media del planeta a 1,5 grados centígrados en 2050 con respecto a su nivel de la era preindustrial.
Cuando Trump decidió retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París, Canadá, China y la Unión Europea reafirmaron inmediatamente sus compromisos con el pacto climático, y en julio el G20 consideró el acuerdo "irreversible".
El tiempo apremia, según Arias Cañete, y los socios deben "reducir sus diferencias y tener una buena comprensión sobre cómo poner en marcha este ambicioso acuerdo", concluido en diciembre de 2015.
El calendario dispone tener listo este "libro de normas (...) antes de la COP24 de Katowice (Polonia) a finales de 2018", explicó. Entretanto, en noviembre se celebrará la próxima conferencia de Naciones Unidas sobre el cambio climático (COP23) en Bonn, Alemania.
Para ello, "la UE está dispuesta a poner en marcha el acuerdo de París pero también estamos decididos a aumentar nuestras ambiciones con el tiempo", añadió Arias Cañete.
Otro gran emisor de CO2, China, dio cuenta de su intención de prohibir la venta de automóviles propulsados por motores de combustibles fósiles, un ambicioso objetivo para el primer mercado automóvil del mundo.
Xie Zhenhua, representante chino en materia de cambio climático, consideró necesario adoptar rápidamente medidas para "asegurarnos de que podemos llevar a cabo" los objetivos del Acuerdo de París.
Queda por saber "cómo combinar las acciones sobre el clima con el crecimiento económico, la protección de las poblaciones y la creación de empleo", señaló.
"Si podemos combinar todos estos actores, haremos del Acuerdo de París un gran éxito", aseguró Xie.