El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, anunció el martes que la política oficial de su país es enviar en un plazo de cinco años astronautas estadounidenses a la Luna, incluyendo a la primera mujer.
"Por orden del Presidente, la política oficial de esta administración y de Estados Unidos es hacer volver a los astronautas estadounidenses a la Luna en cinco años", dijo Pence durante un discurso en Huntsville, Alabama.
"La primera mujer y el próximo hombre en la Luna serán astronautas estadounidenses, lanzados por cohetes estadounidenses desde suelo estadounidense".
La fecha marcada hasta ahora para un regreso al satélite natural de la Tierra era 2028, pero el gobierno de Donald Trump ha manifestado su frustración por los retrasos y los excesos presupuestarios del programa de la NASA para construir su próximo gran cohete SLS, cuyo primer vuelo fue reprogramado recientemente para 2021.
Durante su discurso, el vicepresidente arremetió contra la agencia espacial, criticó su "inercia burocrática" y la llamó a "renovar su entusiasmo".
Además, amenazó con confiar a empresas privadas las futuras misiones si la NASA no estaba lista a tiempo.
"Si los cohetes privados son la única manera de llevar de vuelta a la Luna a los astronautas estadounidenses en cinco años, entonces serán cohetes privados", declaró.
El jefe de la NASA, Jim Bridenstine, dijo recientemente que sería probablemente una mujer la próxima en caminar por el suelo lunar, que ningún humano ha pisado desde 1972.