Estados Unidos autorizó el jueves una tercera dosis de la vacuna contra el COVID-19 para las personas con sistemas inmunitarios debilitados, mientras el país lucha contra la propagación de la variante delta.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) autorizó el uso de emergencia de una tercera inyección de las vacunas de Pfizer-BioNTech y Moderna.
"El país ha entrado en otra ola de la pandemia de covid-19 y la FDA es especialmente consciente de que las personas inmunodeprimidas corren un riesgo especial de padecer una enfermedad grave", dijo la comisaria en funciones de la Administración de Alimentos y Medicamentos, Janet Woodcock, en un comunicado.
La FDA dijo que esta tercera dosis adicional era para los receptores de trasplantes de órganos sólidos o aquellos con sistemas inmunitarios debilitados.
Algunos medios de comunicación estadounidenses sugieren que un millón de estadounidenses han recibido la tercera dosis contra el coronavirus, sin autorización, en un intento de aumentar la protección contra el covid-19.
"Las personas que están completamente vacunadas están adecuadamente protegidas y no necesitan una dosis adicional de la vacuna covid-19 en este momento", dijo Woodcook.
Estados Unidos rechazó a principios de mes una petición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de detener las vacunas de refuerzo para ayudar a compensar la desigualdad en la distribución de dosis entre los países ricos y los pobres.
Más de 619.000 personas han muerto en Estados Unidos a causa del covid-19, y el número de contagios ha aumentado considerablemente en los últimos meses debido a la propagación de la variante delta.
El programa de vacunación del país se ha ralentizado sobre todo en las regiones políticamente conservadoras del sur y el medio oeste, así como entre los más jóvenes, la población de ingresos más bajos y las minorías raciales.
"En este momento, aparte de los inmunodeprimidos, no vamos a dar refuerzo a la gente", dijo el jueves a la NBC el principal asesor del covid-19 en Estados Unidos, Anthony Fauci.
"Pero les haremos un seguimiento muy cuidadoso, y si lo necesitan, estaremos preparados para dárselo... inevitablemente habrá un momento en el que tendremos que dar refuerzos".
Las vacunas contra el covid-19 son gratuitas y están disponibles en Estados Unidos, pero sólo la mitad de la población tiene la pauta de vacunación completa.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció en julio que todos los funcionarios federales tienen que estar vacunados o bien presentar test que demuestren que no se han contagiado con el coronavirus, en momentos en que el país sufre un aumento de las hospitalizaciones.
Los contagios por coronavirus se han disparado a una media diaria de más de 100.000, un nivel que no se veía desde la oleada invernal, debido a la propagación de la variante delta.