A cuatro años de su derrota ante Joe Biden, el empresario Donald Trump derrotó a Kamala Harris y enfrentará su segundo período como presidente de los Estados Unidos. Esta vez, asumirá en medio de varios procesos judiciales e incluso en uno de ellos se encuentra condenado.
Se trata del bullado caso de Stormy Daniels, donde Trump fue declarado culpable por alterar registros contables para esconder un soborno que pagó a la actriz porno Stormy Daniels para encubrir un affaire.
Para ser declarado culpable Trump debía ser condenado con un fallo unánime del jurado popular que revisó el caso y eso se dio en el mes de mayo y la sentencia se fijó para julio. Sin embargo, por distintos motivos la lectura se fue retrasando.
A esta fecha, sigue pendiente que el juez Juan Merchan dicte su sentencia, la cual podría implicar una pena de prisión.
Que Trump haya ganado la elección altera el panorama. Según recoge BBC, la exjefa de división de juicios del fiscal de distrito de Manhattan comentó en una entrevista que "si (Trump) gana las elecciones, no habrá una sentencia significativa".
Entre los expertos y seguidores del caso, hay quienes señalan que considerando aspectos como que Trump fue hallado en desacato una decena de veces, el juez podría imponer una pena más fuerte y también hay quienes consideran que habrá una pena leve o que la sentencia se siga retrasando incluso hasta después del período de Trump al mando del país.
Jeffrey Cohen, profesor de Derecho de Boston college, dijo a BBC que “un presidente en ejercicio no se vería obligado a ingresar en la cárcel, por lo que en teoría, si es condenado a prisión, podría cumplirlo una vez dejado el cargo”.
¿Quién es Stormy Daniels?
"Todo lo que tenía que hacer era firmar un papel para guardar silencio", dijo ella en un documental reciente. Pero nada salió según lo previsto para Stormy Daniels.
La exactriz cobró 130.000 dólares en 2016 para guardar silencio sobre una relación sexual que asegura haber mantenido con Trump en 2006, lo que él siempre ha negado.
Cuando el caso salió a la luz en 2018, estuvo en el punto de mira, convertida en un icono feminista para algunos y odiada por los partidarios del magnate.