Activistas norcoreanos refugiados en Corea del Sur anunciaron el martes el lanzamiento a través de la frontera de más globos con panfletos contra el gobierno de Pyongyang, un gesto que ya provocó una elevada tensión bilateral.
A raíz de esas tensiones, Corea del Norte interrumpió el diálogo con el vecino del sur y la semana pasada dinamitó la sede de una oficina de enlace. Además, amenazó con reforzar su presencia militar en y alrededor de la Zona Desmilitarizada.
Las autoridades del sur han tratado de bloquear el lanzamiento de los folletos a través de la frontera, pero el grupo activista Fighters for Free North Korea dijo que había lanzado 20 globos cerca de la ciudad fronteriza de Paju el lunes por la noche.
Además de medio millón de folletos, el grupo también envió 1.000 memorias USB, que generalmente contienen teledramas y música de Corea del Sur, y 2.000 billetes de un dólar, que alientan a las personas a recoger el material.
"Los folletos volaron hacia el norte con el viento del sur", dijo el líder del grupo, Park Sang-hak, quien prometió continuar los lanzamientos.
Corea del Norte amenaza con tomar represalias con sus propios lanzamientos de folletos, y la agencia oficial de noticias KCNA informó el lunes que se habían producido 12 millones de panfletos y se habían aprestado 3.000 globos para enviarlos al sur.
Las dos Coreas solían intercambiar propaganda regularmente, pero acordaron detener esas provocaciones durante una cumbre en 2018.
Las relaciones intercoreanas están estancadas tras el fracaso de una cumbre en Hanói entre Kim y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a principios del año pasado.
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, inicialmente negoció un diálogo entre Pyongyang y Washington, pero el Norte ahora lo culpa por no persuadir a Estados Unidos a relajar las sanciones económicas.
