La jefa Ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, aseguró que el proyecto de ley de extradición que provocó la mayor crisis política del territorio en décadas estaba muerto, admitiendo que el trabajo del gobierno en el proyecto de ley había sido un "fracaso total".
Según informó Reuters, el proyecto de ley, que habría permitido enviar a personas de Hong Kong a China continental para enfrentar un juicio, provocó enormes y violentas protestas callejeras y sumió a la ex colonia británica en un caos.
A mediados de junio, Lam respondió a las enormes protestas suspendiendo el proyecto de ley, pero esa medida no logró calmar a los críticos, quienes continuaron manifestándose en contra del proyecto de ley y pidieron la renuncia de Lam.
Hong Kong fue devuelto a China desde Gran Bretaña en 1997.