Los diputados británicos rechazaron por tercera vez este viernes, el día en que Reino Unido debía abandonar la Unión Europea (UE), el acuerdo de Brexit negociado por Theresa May, sumiendo el futuro del país en una mayor incertidumbre.
El 27 de marzo, mientras el Parlamento debatía las posibles alternativas al acuerdo de May, ésta reunió a sus diputados y les prometió dimitir en cuanto lograse la aprobación del texto.
Al día siguiente, el gobierno anunciaba que volvería a someter el Tratado de Retirada a la Cámara de los Comunes el 29 de marzo, aunque sin la declaración política lo acompaña.
El Tratado de Retirada fue tumbado esta vez por 344 votos contra 286 al término de una caótica serie de votos durante la cual la Cámara de los Comunes ya lo había rechazado masivamente en dos ocasiones, el 15 de enero y el 12 de marzo.