AFP
La empresa estatal Petroperú denunció el miércoles el riesgo de una "catástrofe ambiental" por el derrame de 8.000 barriles de petróleo en una región de la Amazonía, luego de que un oleoducto fuera cortado por nativos.
"Son más o menos 8.000 barriles de petróleo los que se han derramado" en el oleoducto Norperuano, dijo Beatriz Alva, gerente de gestión social de Petroperú, al canal N de televisión.
Advirtió también que por la magnitud del derrame "podemos estar ante una catástrofe ambiental".
El hecho ocurrió la noche del martes en la alejada comunidad de Mayuriaga, en el distrito de Morona, de la región amazónica de Loreto.
La representante de Petroperú señaló que los pobladores "habían cortado el oleoducto" e impidieron que cuadrillas de trabajadores de la petrolera estatal lo repararan.
"El bombeo de petróleo persiste al día de hoy" miércoles, acotó Alva.
Los pobladores amenazaron el 20 de noviembre con cortar las tuberías del oleoducto, que transporta crudo desde los pozos en la Amazonía hasta las refinerías en la costa norte de Perú.
El reclamo de la comunidad de Mayuriaga no tiene nada que ver con Petroperú, pues lo que piden es anular los resultados de las elecciones locales celebradas en ese distrito en octubre, alegando irregularidades.
La Sociedad Peruana de Hidrocarburos indicó por su parte que el atentado al oleoducto "es un crimen ambiental".
"El oleoducto es un activo crítico nacional y ningún tipo de reclamo sea político, electoral, social o cualquier otro, justifica su ataque", indicó el gremio en un comunicado.
El oleoducto Norperuano es una de las obras de mayor envergadura del país. Fue construido hace cuatro décadas y transporta el crudo desde la región amazónica hasta Piura, en la costa, extendiéndose por unos 800 km.
Los derrames de crudo por atentados en el oleoducto han sido moneda corriente en los últimos años en Perú. El más reciente se remonta a febrero.
En ocasiones los derrames se debieron a accidentes por falta de mantenimiento o a ataques de comunidades como forma de protesta.
En 2016 hubo 13 derrames. Según Petroperú, 10 de ellos fueron causados por personas.
Desde inicios de 2017, más de 120 comunidades indígenas amazónicas piden al gobierno que se les consulte antes de firmar contratos de explotación de hidrocarburos para evitar más derrames.