En agosto del año pasado el doctor Pablo Enrique Ulloa Cáceres, un reconocido médico de Honduras, falleció tras contagiarse de COVID-19, luego de atender en primera línea a pacientes de coronavirus en su país.
Casi ocho meses después, su hermano, Daniel Enoch Ulloa, lo recordó con un duro mensaje a través de su cuenta de Twitter, apuntando a todos aquellos que no respetan las medidas sanitarias.
“Espero se hayan tomado bonitas fotos en la playa y las guarden. Esta fue la última foto en vida que vi de mi hermano médico que murió por cuidar de imbéciles como usted”, escribió Daniel en la red social.
Según detalló ABC de España, Pablo Enrique Ulloa Cáceres fue un reconocido médico y director de las Clínicas Periféricas de Emergencia (Cliper) en Tegucigalpa, la capital de Honduras.
Durante Semana Santa la salida de cientos de personas en el país centroamericano molestó a la familia del médico, en especial a su hermano, quien reaccionó con molestia y rechazando este incumplimiento de las medidas sanitarias.