La policía de Nueva Jersey halló esta semana 17 cadáveres apilados en un hogar de ancianos afectado por la pandemia de coronavirus, una macabra señal de cómo el COVID-19 está afectando a estas residencias con población altamente vulnerable.
Según el New York Times, tras una pista anónima sobre un cadáver en un cobertizo, la policía halló 17 cuerpos en la pequeña morgue del establecimiento Andover Sub-Acute and Rehabilitation Unit, una de las mayores residencias para ancianos de Nueva Jersey. Su morgue tiene capacidad para cuatro cuerpos.
La policía de la pequeña localidad de Andover, a unos 100 km al oeste de Nueva York, no confirmó las cifras.
El hogar de ancianos reportó recientemente 68 muertos en el lugar, incluidos estos 17. De los 68, 26 tenían coronavirus, según el periódico.
"El personal estaba claramente desbordado, y probablemente eran pocos", dijo a CNN Eric Danielson, jefe de la policía local.
"Tengo el corazón destrozado", dijo el gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, en su cuenta Twitter. "Estoy en shock de que hayan autorizado apilar los cuerpos en una morgue improvisada".
El gobernador pidió a la justicia investigar el asunto.
La policía de Andover publicó en Facebook un comunicado en el cual dice que uno de los dueños de la residencia, Chaim Scheinbaum, admitió "problemas de retrasos y de horarios nocturnos durante el fin de semana que contribuyeron a la presencia de más muertos de lo habitual" en la morgue.
Pero dijo que la morgue puede alojar hasta 12 cuerpos, y que en ningún momento hubo más de 15.
El Times indicó que de los pacientes que quedan en el hogar, 76 tienen el virus, así como 41 miembros del personal.
Según el canal NBC la epidemia ha causado la muerte de más de 5.600 personas en hogares de ancianos, de un total de más de 32.000 fallecimientos en todo Estados Unidos.