AFP
Corea del Sur y Estados Unidos reanudaron este lunes unas maniobras militares a pequeña escala que habían sido suspendidas tras la histórica cumbre entre el presidente estadounidense Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un.
Los ejercicios combinados entre los dos cuerpos de infantería de marina formaban parte de una "selección" de maniobras aplazadas en junio con motivo de la reunión de Singapur, cuando Trump prometió cesar estos ejercicios onerosos y considerados provocadores por el Norte.
Este lunes se reanudó el Programa Surcoreano de Intercambio de Marines (KMEP), en el que participan unos 500 infantes de marina surcoreanos y estadounidenses, para una duración de dos semanas en Pohang, en el sur del país, declaró una portavoz del ministerio surcoreano de Defensa.
"Habíamos dicho anteriormente que llevaríamos a cabo, como estaba previsto, ejercicios a pequeña escala o a nivel de batallones entre Estados Unidos y Corea del Sur", dijo Choi Hyun-soo.
Washington tiene 28.500 soldados desplegados en Corea del Sur para protegerla de su vecina del Norte, dotado del arma atómica.
Durante mucho tiempo los dos países llevaron a cabo ejercicios conjuntos calificados de meramente defensivos, aunque Pyongyang los consideraba como el ensayo de la invasión de su territorio.
Además de estos ejercicios, en agosto se suspendieron también las maniobras anuales Ulchi Freedom Guardian, en las que participan decenas de miles de soldados. Los ejercicios aéreos Vigilant Ace previstos para diciembre también fueron postergados.
El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, debe reunirse próximamente con su homólogo norcoreano para hablar de desnuclearización y de una segunda cumbre entre Washington y Pyongyang.
En Singapur, Kim y Trump firmaron una declaración vaga sobre la desnuclearización pero desde entonces las negociaciones no han progresado demasiado.
Estados Unidos, que lideró los esfuerzos internacionales realizados en 2017 para hacer presión sobre la economía norcoreana, rechaza un alivio de las sanciones hasta que Pyongyang no haya procedido a una "desnuclearización final y totalmente comprobada".
Pyongyang condenó los "métodos de gánster" de los estadounidenses acusados de exigir su desarme unilateral sin hacer concesiones.
El ministro norcoreano de Relaciones Exteriores amenazó el viernes a Estados Unidos con retomar el desarrollo de armas nucleares si no le levantan las sanciones económicas.