La madrugada de este viernes finalmente tocó tierra estadounidense el huracán Florence, tormenta que provocó que el estado de Carolina del Sur evacuara a un millón de personas y en el caso de Carolina del Norte unas 250 mil antes de su llegada.
Durante la tarde de este viernes, el evento finalmente fue degradado a tormenta tropical, sin embargo, las autoridades reafirmaron que la situación sigue siendo de peligro para las personas.
Asimismo, durante esta jornada fueron confirmadas las cuatro primeras víctimas fatales que dejó el paso del huracán.
Según indicó NBC News, una madre y su hijo murieron luego de que los fuertes vientos provocaran el desprendimiento de un árbol que terminó cayendo sobre su casa. Del interior de la vivienda fue rescatado el padre de familiar, quien fue derivado a un hospital con heridas graves.
A estas víctimas se sumó otra mujer que perdió la vida por un problema médico que sufrió mientras se desarrollaba la tormenta. Si bien trató de acudir a un centro médico, el mal tiempo y la caída de unos árboles obstaculizaron su camino.
Adicionalmente, la agencia Reuters confirmó la muerte de una cuarta persona, aunque momentáneamente se desconoce cuáles fueron las circunstancias de su fallecimiento.
Hasta el momento Florence se ha dejado sentir con mayor fuerza en la ciudad de Wilmington en Carolina del Norte, donde además de la caída de árboles, se han producido inundamientos, voladuras de techumbres y daños en algunas viviendas.
