La primera vista del proceso en segunda instancia tiene lugar después de que Schettino, recurriera la pena de 16 años de cárcel en primer grado.
El comandante, que no se presentó en la audiencia de este jueves (28.4.2016), continúa acusado de cargos como homicidio imprudente múltiple, desastre imprudente, naufragio y abandono de la nave, ya que tras el naufragio se embarcó en un bote supuestamente para llegar a tierra firme.
Lo juzgará la Primera Sección Penal de la corte florentina, presidida por la jueza Grazia D'Onofrio, mientras que la acusación la ejercerá el fiscal sustituto Alessandro Leopizzi y el sustituto de la Fiscalía General de distrito, Giancarlo Ferrucci.
Se prevé intento de aumentar la condena
Schettino estuvo representado por los abogados Saverio Senese y Donato Laino, y este último explicó a los medios que su cliente "está tranquilo" y que se encuentra en su domicilio de Meta di Sorrento, próximo a Nápoles.
Está previsto que la acusación pública trate de aumentar o, por lo menos, mantener la condena de dieciséis años de cárcel para el polémico comandante. Y es que los fiscales en primera instancia reclamaron una pena de 26 años y su reclusión inmediata para evitar su posible fuga al extranjero, algo que fue denegado por los jueces del Tribunal de Grosseto, donde se celebró el proceso.
La defensa de Schettino, por su parte, seguirá previsiblemente la estrategia mantenida en la fase anterior del juicio de repartir responsabilidades entre quienes estaban al mando de la embarcación.
Murió un submarinista en labores de reflote
Schettino fue condenado el 11 de febrero de 2015 a dieciséis años de reclusión, si bien no entró en prisión ya que aún no se ha dictado sentencia en firme, es decir, en tercera y última instancia, por el Tribunal Supremo.
El naufragio del "Costa Concordia" se produjo el 13 de enero de 2012 frente a las costas de la isla toscana del Giglio (centro), provocando la muerte de 32 de los 4.229 pasajeros de la nave.
Además del balance humano, los restos de la nave permanecieron durante dos años varados ante la isla e Italia tuvo que poner en marcha un faraónico sistema de enderezamiento, reflote y traslado hacia Génova (noroeste), donde actualmente está siendo desguazada. En las labores de reflote perdió la vida un submarinista español en febrero de 2014.