AFP
Es la primera vez que las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una coalición kurdo-árabe que combate al grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria, anuncian haber sido víctimas de un bombardeo ruso.
Según ellas, esos ataques ocurrieron en la provincia de Deir Ezzor, la última en manos del EI en Siria, donde la organización yihadista trata de resistir a sendas ofensivas del régimen y de las FDS.
La operación de las tropas gubernamentales apoyadas por la aviación rusa se concentra en el oeste de esa provincia, en concreto en la ciudad de Deir Ezzor, su capital. Mientras que las FDS, respaldadas por los aviones estadounidenses, intentan expulsar al EI del este de la provincia.
"Nuestras fuerzas sufrieron esta mañana un ataque de la fuerza aérea rusa y del régimen sirio en la zona industrial (en el noreste de la ciudad de Deir Ezzor). Seis de nuestros combatientes resultaron heridos", indicaron las FDS en un comunicado.
"Mientras nuestras fuerzas consiguen grandes victorias contra el EI en Raqa (norte) y Deir Ezzor (...), algunos intentan entorpecer el avance de nuestras tropas", añadieron.
Al anunciar su ofensiva contra el EI en el este de la provincia de Deir Ezzor, las FDS aseguraron que no había ninguna coordinación con las fuerzas del régimen de Bashar al Asad.
Pero, según la coalición internacional liderada por Estados Unidos, se ha trazado una línea en la zona para evitar cualquier incidente entre los múltiples actores implicados en la guerra siria.
El conflicto, que comenzó en marzo de 2011 después de que el régimen reprimiera a sangre y fuego unas manifestaciones prodemocracia, enfrentó primero al ejército y a los rebeldes sirios. Pero, con el paso del tiempo, se ha ido convirtiendo en una guerra compleja con numerosos protagonistas, entre ellos actores regionales e internacionales y varios grupos yihadistas. Desde su inicio murieron más de 330.000 personas y millones tuvieron que abandonar sus hogares.