El gobierno de China anunció el domingo sanciones contra cinco empresas de defensa estadounidenses en respuesta a su implicación en la venta de armas a Taiwán, isla que Pekín reclama como parte de su territorio.
China ha prometido retomar algún día -incluso por la fuerza- a Taiwán, mientras que el Congreso de Estados Unidos exige el suministro de armas a esa democracia autónoma para su defensa.
Durante diciembre del año pasado, el Departamento de Estado estadounidense aprobó un paquete de armas por un valor de 300 millones de dólares (unos 266.683.410.000 millones de pesos chilenos aproximadamente), para reforzar el sistema conjunto de mando y control de combate de Taipéi, lo que llevó a Pekín a afirmar que tomaría "contramedidas" no especificadas contra las empresas implicadas.
El Ministerio de Asuntos Exteriores chino identificó el domingo a esas empresas como BAE Systems Land and Armament, Alliant Techsystems Operation, AeroVironment, ViaSat y Data Link Solutions.
"Las contramedidas consisten en congelar las propiedades de esas compañías en China, incluidos sus bienes muebles e inmuebles, y prohibir a organizaciones e individuos en China las transacciones y la cooperación con ellas", explicó la cartera.
"Las ventas de armas estadounidenses a la región china de Taiwán perjudican gravemente la soberanía y los intereses de seguridad de China", añadió el ministerio.
China contra Taiwán
Pekín ha aumentado la presión sobre Taiwán desde que la presidenta de tendencia independentista Tsai Ing-wen asumió el poder en 2016, convirtiéndose, además, en la primera mujer presidenta del país.
China, por su parte, envía regularmente aviones de guerra y buques cerca de la isla, donde el Ministerio de Defensa ha informado recientemente de varios avistamientos de globos aerostáticos.
Tanto Washington como Taipéi han advertido a Pekín de que no intente influir en las elecciones presidenciales que se celebran este mes en Taiwán.