El Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) rehusó, durante la jornada de este jueves, debatir sobre la situación en China tras intensas presiones de Pekín.
Una decena de países, entre ellos Estados Unidos y Reino Unido, habían pedido que el Consejo organizara un debate sobre la región autónoma uigur del Xinjiang, en el noroeste de China, donde Pekín es acusado de crímenes contra la humanidad.
Pero el proyecto de decisión fue rechazado por 19 votos en contra, 17 a favor y 11 abstenciones.
China recibió el apoyo de sus aliados tradicionales, como Cuba y Venezuela, pero también de Pakistán e Indonesia, dos grandes países musulmanes, así como de países africanos.
Esta es la primera vez en la historia del Consejo de Derechos Humanos, establecido en 2006, que un proyecto de decisión se refiere a China.
Informe de Bachelet
A fines de agosto se publicó el informe elaborado por la oficina de la ex Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, sobre graves abusos a los derechos humanos además de advertir posibles crímenes contra la humanidad y denuncias creíbles de torturas.
"El alcance de la detención arbitraria y discriminatoria de uigures y miembros de otros grupos mayoritariamente musulmanes (...) puede ser constitutivo de crímenes internacionales, en particular crímenes contra la humanidad", señala dicho informe.
"Denuncias de patrones de tortura o maltrato, incluyendo tratamientos médicos forzados y condiciones de detención adversas, son creíbles, como lo son las denuncias de incidentes individuales de violencia sexual y de género", agrega el documento.