No obstante, el líder opositor Henrique Capriles dijo que los venezolanos no pueden conformarse con esa cantidad, puesto que al Poder Electoral siempre hay que entregar más de lo que pide.

Asimismo, reiteró su denuncia de que se ha puesto en marcha una "operación morrocoy" (tortuga) por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE) para que el proceso de validación, al que deberían acudir más de 1,3 millones de personas, se realice de forma lenta.

"Dispusieron en todo el país 300 máquinas para más de 1,3 millones de personas", criticó y dijo que muchos de esos equipos han presentado fallas, además de estar dispuestos en zonas distantes de la mayoría de los lugares en los que se ubica la mayor cantidad de los firmantes.

Maduro: Oposición debe sentarse a dialogar

Por su parte, el jefe de Estado venezolano, Nicolás Maduro, reiteró hoy que la oposición debe sentarse a dialogar con su Gobierno, una invitación que no ha recibido respuestas positivas por parte de sus adversarios.

A lo largo de dos discursos pronunciados en diferentes escenarios, uno de ellos en una marcha de "afrodescendientes" que llegó hasta el palacio presidencial para brindarle apoyo, Maduro pidió ayuda "al país" para "obligar" a la oposición reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a sentarse en una mesa de diálogo.

Comentó que ha convocado al parlamentario opositor Henry Ramos Allup a dialogar "tres veces" como presidente de la Asamblea Nacional (AN) y que éste se ha negado. "Yo soy capaz de ir a ver al mismísimo diablo por la paz de los venezolanos, por la tranquilidad y la superación de los problemas, para buscar fórmulas conjuntas de unión nacional", señaló.

Resaltó que ha convocado a la oposición al diálogo con el apoyo de la Unasur y de una comisión de expresidentes internacionales encabezada por el exjefe de Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero que trabaja como mediador junto a los exgobernantes Leonel Fernández y Martín Torrijos, de República Dominicana y Panamá, respectivamente.

Sobre esta mediación y con respecto a la intervención de Rodríguez Zapatero ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), Maduro dijo que el político español había sido víctima de una "campaña infernal" después de que diera su discurso en este foro.

“Maduro quiere comprar tiempo”

Asimismo, Henrique Capriles, se reunió con el subsecretario de Estado de EE. UU. para Asuntos Políticos, Thomas Shannon, que llegó hoy a Caracas para reactivar un diálogo entre los dos países a quien aclaró que en Venezuela.

Capriles comentó que Maduro llama a un diálogo "con la única intención de comprar tiempo" para que no se realice el revocatorio. También dijo que la oposición venezolana ha pedido que se incluyan otros mediadores y mencionó que el papa Francisco "debería designar a una persona" para este fin "y que en efecto exista un proceso de diálogo".

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