Brasil reportó 896 nuevas muertes por COVID-19 en las últimas 24 horas, con lo que el total de víctimas fatales llegó a los 638.048 óbitos, en momentos en que la ómicron, la nueva variante del coronavirus, sigue multiplicándose en el país, informó este sábado (12.02.2022) el Gobierno.
Los contagios en el gigante suramericano sumaron 27.425.743, luego de que fueran notificados 140.234 nuevos positivos en la última jornada, según el balance del Ministerio de Salud, divulgado hoy. Los datos confirman a Brasil como el segundo país con mayor número de muertes, detrás de Estados Unidos y el tercero en cantidad de contagios, después de EE.UU. e India.
Aunque las cifras están disparadas y la potencia de América del Sur está reportando números nunca antes vistos para los contagios, por el virus, la cantidad de muertos diarios no ha llegado a los 4.250 óbitos registrados el 8 de abril de 2021, cuando Brasil vivió el más nefasto efecto de la covid-19, desde que la pandemia llegó al país, hace ya casi dos años.
Avance en campaña de vacunación
De acuerdo con los expertos, esto se debe al avance en la campaña de vacunación donde más de 154,4 millones de personas ya cuentan con el esquema completo de inmunización (las dos dosis o la vacuna de dosis única), lo que equivale al 72,5 por ciento de los 213 millones de habitantes de Brasil.
Los especialistas estiman que el pico de casos -que se cree será cuando el promedio de contagios se ubique en unos 200.000 diarios- debe darse hacia la otra semana en el país, aunque eso ya ha ocurrido en algunos estados, como Sao Paulo, Amazonas y Río de Janeiro que fueron de los primeros en reportar casos con ómicron.
Ya en las estimaciones sobre el pico de muertes por COVID-19, los expertos creen que llegará después del de contagios, hacia la última semana de febrero, cuando el promedio de víctimas fatales sea de unos 1.000 óbitos diarios.
La ómicron llegó al gigante suramericano a finales del año pasado pero sus efectos comenzaron a verse a partir de enero cuando los positivos por el virus empezaron a multiplicarse vertiginosamente llegando a las cifras registradas en el último mes, nunca antes vistas en Brasil.
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