Jair Bolsonaro, Presidente de Brasil, se retractó sobre el uso de cloroquina y reconoció que el fármaco no tiene eficacia para combatir contagios de COVID-19.
"Por lo menos no maté a nadie", señaló en medio de una vocería que realiza el Mandatario todos los jueves.
Según rescata EFE, Bolsonaro aseguró que "puede que allá al frente digan que la opción (de la cloroquina) es cero, que es un placebo. Todo bien, paciencia, me disculpo".
La cloroquina, sobre todo, pero también la hidroxicloroquina, son medicamentos cuyos efectos secundarios pueden ser importantes e incluso graves. Además no hay evidencia de resultados contra el COVID-19.
Este medicamento se prescribe desde hace varias décadas contra el paludismo, un parásito transmitido por el mosquito
