El Presidente Joe Biden implementará un plan para aumentar los impuestos a los estadounidenses más ricos y sus inversiones para financiar alrededor de 1 billón de dólares en cuidado infantil, educación preescolar universal y licencia pagada para los trabajadores.
El plan, que forma parte del impulso de la Casa Blanca para una reforma radical del sistema fiscal de EE.UU. para hacer que las empresas ricas y grandes paguen más, exige aumentar la tasa marginal máxima del impuesto sobre la renta del 37% al 39,6% y casi duplicar los impuestos sobre las ganancias de capital al 39,6% para las personas que ganan más de 1 millón de dólares, según informó Reuters.
Esa sería la tasa impositiva más alta sobre los impuestos a las ganancias de capital, que en su mayoría son pagados por el 1% superior de los estadounidenses, desde que se introdujo el impuesto en 1913.
La noticia de la propuesta provocó fuertes caídas en Wall Street, con el índice de referencia S&P 500 (.SPX) cayendo un 1% a primera hora de la tarde, su caída más pronunciada en más de un mes.
Cualquier aumento de este tipo tendría que pasar por el Congreso, donde el Partido Demócrata de Biden tiene una mayoría estrecha y es poco probable que obtenga el apoyo de los Republicanos.
"Si tuviera la posibilidad de aprobarse, bajaríamos 2,000 puntos", dijo Thomas Hayes, presidente y miembro gerente del fondo de cobertura Great Hill Capital LLC, refiriéndose a los índices bursátiles.
Fuentes señalaron a Reuters que los detalles se darían a conocer la próxima semana antes del discurso de Biden al Congreso. Los detalles fiscales relacionados con el plan, que ha estado en proceso durante meses, fueron informados por primera vez por el New York Times el jueves por la mañana.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que el Presidente discutirá su "Plan de Familias Estadounidenses" durante su discurso ante el Congreso el próximo miércoles, pero se negó a adeltantar cualquier tipo de información.
Dijo que la administración aún no había finalizado los planes de financiamiento, pero enfatizó la determinación de Biden de hacer que los ricos y las empresas paguen por nuevos programas.
"Su opinión es que eso debería estar en las espaldas, que puede estar en las espaldas de los estadounidenses más ricos que pueden pagarlo y de las corporaciones y negocios que pueden pagarlo", dijo Psaki al medio anteriormente citado.