El otrora hombre fuerte de Venezuela, Rafael Ramírez, asegura que el anuncio de la fiscalía de su país de que pedirá su captura a Interpol busca impedir que compita por la candidatura del chavismo con el presidente Nicolás Maduro, a quien acusa de autoritarismo.
"Tienen terror al hecho de que yo vaya para allá y técnicamente me quieren inhabilitar", dijo Ramírez, cuyo paradero se desconoce desde que dejó en diciembre el cargo de embajador de Venezuela ante Naciones Unidas, en declaraciones telefónicas a BBC Mundo.
Ramírez ha sido acusado de corrupción por el fiscal general venezolano, Tarek Saab, quien anunció que solicitará a Interpol que lance una orden de captura contra el exministro de Petróleo de ese país.
"Sin llorantina, ciudadano Ramírez: nosotros en próximos días vamos a solicitar una orden de aprehensión con la correspondiente alerta roja hacia su persona por los delitos de peculado doloso, legitimación de capitales y asociación (para delinquir)", indicó Saab el jueves por televisión.
Sin embargo, Ramírez volvió a rechazar como "patrañas y mentiras" las acusaciones en su contra y sostuvo que si tuviera una discusión sobre corrupción con Saab, "no saldría nada bien librado el actual gobierno".
"Miedo"
Ramírez ha incrementado el tono de sus críticas a Maduro en los últimos tiempos, sobre todo después que dejó la embajada venezolana ante la sede de la ONU en Nueva York.
Esa ruptura en diciembre coincidió con el arresto de decenas de funcionarios de la petrolera estatal venezolana PDVSA, que Ramírez presidió durante años, por presuntos hechos de corrupción.
Ese mismo mes, la fiscalía abrió una investigación penal contra Ramírez, a quien Saab calificó como "uno de los principales desfalcadores" de PDVSA.
Exmano derecha del fallecido presidente Hugo Chávez, Ramírez sostuvo que existe una "operación" para inhabilitarlo como potencial rival de Maduro por la candidatura del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
El oficialismo venezolano anunció esta misma semana que adelantará las elecciones presidenciales en el país para antes de 30 de abril, en lugar de celebrarlas en diciembre como es tradicional.
Diosdado Cabello, considerado el número dos del chavismo, sostuvo simultáneamente que "el único candidato presidencial por el PSUV será el actual jefe de Estado, Nicolás Maduro".
Pero Ramírez advirtió que "sin lugar a dudas" el chavismo desaparecerá si Maduro es candidato del PSUV.
"Todo lo que hizo Chávez lo están desmontando, empezando por nuestra política petrolera y PDVSA", dijo Ramírez a BBC Mundo.
Y sostuvo que esos cambios también afectan el área de las libertades Venezuela.
"Aquí el que diga lo que piensa y el que disienta de lo que dice el presidente Maduro o peor aún, su círculo íntimo, sencillamente se expone a ser sancionado, perseguido, acusado", señaló.
"Hay una cantidad de gente detenida por expresar sus opiniones o disentir que no tiene ningún derecho a la defensa o al debido proceso. Es una situación donde al final se ha impuesto el miedo y el gobierno se desliza aceleradamente en el autoritarismo y eso no tiene nada que ver con Chávez", añadió.
"Triquiñuelas"
Ramírez ha dicho que quiere competir con Maduro en unas elecciones para que los militantes del PSUV puedan elegir en secreto a su candidato.
"Nicolás no me gana ni unas primarias haga lo que haga, siempre que el pueblo pueda expresarse secretamente", afirmó.
Sin embargo, dijo estar convencido de que existe un pacto oculto entre el gobierno de Maduro con una parte de la oposición para mantenerse en el poder, que incluye la anticipación de los comicios.
"Creo que ya hay acuerdo en las elecciones, primero es obtener la gobernabilidad y se va a establecer una especie de equilibrio entre partidos para convivir", señaló Ramírez.
"Siempre, claro, pareciendo que están en una confrontación pero con muchas cosas ya acordadas", agregó.
La realización de las comicios presidenciales era uno de los puntos principales de discusión en los diálogos que el gobierno de Maduro y la oposición venezolana llevan adelante desde septiembre de 2017 en República Dominicana bajo el auspicio del presidente Danilo Medina.
No obstante, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela excluyó el jueves a la opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) de las elecciones del 30 de abril de 2018.
Según el TSJ, el hecho de que la MUD es una coalición de varios partidos "contraría abiertamente la prohibición de la doble militancia".
Ramírez sostuvo que "hay otros partidos de la oposición que van a participar" en las elecciones.
"Lo que se está quitando del medio es a un sector de la MUD", agregó.
"Esto es política palaciega, triquiñuelas políticas".