La prueba nuclear que Corea del Norte realizó el 3 de septiembre generó un terremoto de magnitud 6,3 y más de tres meses después sigue habiendo réplicas.

El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por su sigla en inglés) dijo el sábado que había detectado dos más.

Esto provocó un debate sobre qué puede estar ocurriendo bajo tierra.

¿Qué pasó durante la prueba nuclear?

Corea del Norte probó su bomba nuclear más poderosa en su sitio de pruebas Punggye-ri, una zona montañosa del noroeste del país.

Pyongyang afirmó que era una bomba de hidrógeno, mucho más poderosa que una bomba atómica.

Los expertos han expresado su preocupación de que la explosión haya sido tan potente como para desestabilizar montañas circundantes.

¿Por qué siguen ocurriendo réplicas?

Según el USGS, los temblores del último fin de semana fueron "eventos de relajación". Tuvieron una magnitud de 2,9 y 2,4.

"Cuando tienes una gran prueba nuclear, mueve la corteza terrestre alrededor del área y tarda un tiempo en desaparecer por completo. Hemos tenido algunas (réplicas) desde la sexta prueba nuclear", le dijo un funcionario a la agencia de noticias Reuters.

El "movimiento de la corteza terrestre" es similar a la definición misma de un terremoto y los científicos dicen que solo se puede esperar en las semanas y meses posteriores a una explosión de esa magnitud.

"Estas réplicas para una prueba nuclear de 6,3 grados de magnitud no son muy sorprendentes", le dijo a la BBC la doctora Jascha Polet, sismóloga y profesora de geofísica de la Universidad Politécnica Estatal de California.

Después de cualquier temblor de ese tamaño, las réplicas con magnitud decreciente son comunes a medida que la roca se mueve y libera el estrés.

El área alrededor del sitio del terremoto "experimenta deformación, y esto crea áreas de mayor y menor estrés, lo que afecta la distribución de las réplicas", explicó Polet.

"El hecho de que la fuente del terremoto sea una explosión no cambia la forma en que esperamos que la energía se redistribuya", le dijo a la BBC la geofísica e investigadora de desastres Mika McKinnon.

Pero una investigación sobre explosiones de una magnitud similar a la prueba nuclear norcoreana en el sitio de pruebas de Estados Unidos en Nevada, donde durante décadas se llevaron a cabo pruebas nucleares, encontró que las réplicas de estos eventos fueron menos numerosas y de menor magnitud.

Por lo que cada ubicación es única.

¿Pueden los temblores destruir el sitio de pruebas?

Una de las especulaciones después de la prueba de septiembre fue que dañaría el sistema de túneles que Corea del Norte excavó en las montañas en su sitio de pruebas.

"Mientras más energía pongas en un área, más inestable será", afirmó McKinnon, "mientras más pruebas estén ocurriendo, más energía habrá, más redistribución del estrés y más rocas se romperán".

Y añadió que ha habido algunos indicios de colapsos de túneles individuales: "Las señales sísmicas se parecen más a las rocas que a cualquier otra cosa. Eso sucederá cada vez más".

Pero afirmó que no hay manera de saber realmente si todo el sistema del túnel colapsará, ya que es un problema de ingeniería mucho más que científico.

No está claro si este proceso ya ha inutilizado el actual sitio de prueba, pero Corea del Norte ha insinuado que su próxima prueba nuclear podría no ser subterránea.

¿Podrían los temblores causar una erupción volcánica?

Cerca del sitio de prueba de Punggye-ri se encuentra el volcán activo del Monte Paektu, una montaña considerada sagrada en Corea del Norte.

"Las ondas sísmicas golpean el volcán y el magma debajo del volcán", explicó McKinnon, pero dice que es "improbable que cualquiera de esta energía sísmica sea suficiente para desencadenar una erupción".

El volcán entró en erupción por última vez en 1903, pero la última prueba nuclear subterránea provocó preocupación porque los temblores podrían desencadenar otra erupción. Este ha sido un punto de debate, pero hay pocos datos para apoyar esto.

En un estudio publicado en la revista Nature el año pasado se afirma que las ondas sísmicas de una prueba nuclear hipotética de magnitud 7,0 producirían "cambios de estrés" que no eran insignificantes.

Pero, como señala Polet, "se sabe poco acerca de qué procesos pueden y no pueden desencadenar erupciones volcánicas" y no parece haber una correlación documentada entre las explosiones de Nevada y la actividad en áreas volcánicas cercanas, como la montaña Timber y la depresión Long Valley Caldera, ambas en California.

Tampoco se ha registrado actividad como resultado de pruebas nucleares realizadas cerca de las Islas Aleutianas, que tienen actividad sísmica.

El líder norcoreano Kim Jong-un todavía parece confiar en la montaña sagrada.

Según la agencia de noticias Reuters, los medios oficiales norcoreanos informaron que escaló el volcán el sábado junto con varios altos funcionarios para "enfatizar su visión militar".

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