Teherán ha decidido abandonar los compromisos asumidos en el acuerdo nuclear de 2015.
La decisión fue anunciada este domingo, dos días después de que un ataque estadounidense terminara con la vida del poderoso líder militar Qasem Soleimani.
En un comunicado, la autoridad iraní anunció que ya no contemplará limitaciones en su capacidad de enriquecimiento atómico, investigación y desarrollo.
La declaración se produjo después de una reunión de gabinete en Teherán que concluyó que el país ya no se ve obligado a cumplir con el tratado suscrito hace más de cuatro años, aunque continuará cooperando con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Estados Unidos, por su parte, se había retirado del acuerdo nuclear en mayo de 2018.
El anuncio
Según el comunicado oficial iraní, su programa nuclear no tiene más restricciones operativas sobre la capacidad y el porcentaje de enriquecimiento de uranio.
A partir de ahora, el país anunció que sus proyectos atómicos se regularán en base a sus "necesidades técnicas".
Pese a dejar de cumplir con las limitaciones, el Ejecutivo iraní aclaró que no abandona el acuerdo que fue calificado por muchos expertos como histórico.
El Gobierno iraní también adelantó que regresará a sus compromisos si se levantan las sanciones que le impuso Estados Unidos y organismos internacionales.
El acuerdo nuclear limitaba el programa atómico de Irán a cambio del levantamiento de las restricciones internacionales.
Europa, desde 2018, intentó de tomar medidas para salvar el pacto, pero ninguna ha sido efectiva ante el desconocimiento de la Casa Blanca.
Más tensión
Teherán prometió venganza tras la muerte del jefe de la Fuerza Quds y alto mando militar Soleimani.
Ante estas amenazas, el presidente estadounidense., Donald Trump, aseguró el sábado que tiene identificados 52 objetivos de Irán para responder "muy rápido" y "muy fuerte" a las eventuales represalias de Teherán.
El Servicio Europeo de Acción Exterior informó de que el jefe de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, había invitado al ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, a Bruselas para tratar este asunto.
Borrell subrayó "la importancia de preservar" el acuerdo nuclear iraní que, a su juicio, "sigue siendo crucial para la seguridad global", mientras que Rusia, aliado de Irán, expresó su esperanza de que el asesinato del comandante Soleimaní no afectara al pacto de 2015.
Pese a al anuncio de dejar de cumplir los compromisos del acuerdo, las autoridades iraníes han reiterado en numerosas ocasiones que su objetivo no es fabricar armas nucleares.