En junio de 2021, mientras firmaba siete proyectos de ley para flexibilizar el acceso a las armas, el gobernador Greg Abbott declaró que Texas sería el "bastión de la libertad" en EE.UU.
Con esta acción, el republicano, cuyo mandato comenzó en 2015, reafirmaba la histórica tendencia de los gobiernos estatales texanos de favorecer la compra y el porte de armamento entre sus ciudadanos.
A menos de un año de aquella firma, un tiroteo en una escuela de Uvalde, una ciudad en el sur del estado, causó la muerte de 19 menores y dos maestras.
La tragedia sucedió el martes, cuando Salvador Ramos, de 18 años, irrumpió en un salón de clases con dos armas semiautomáticas que compró de forma legal, aunque tenía problemas de comportamiento, según reportes.
El miércoles, al hablar sobre la masacre, el presidente Joe Biden pidió mayores controles a la administración de Abbott y dijo que las leyes del estado son "incorrectas".
Mientras, Beto O'Rourke, quien se postuló sin éxito al Senado en 2018 y este año peleará por la gobernación de Texas, se enfrentó públicamente a Abbott mientras este ofrecía una conferencia de prensa el miércoles.
"El momento de detener el próximo tiroteo es ahora, y ustedes no están haciendo nada", le gritó, antes de que lo sacaran del edificio.
Con la ocurrido en Uvalde, la cifra de tiroteos masivos en Texas asciende a ocho en los pasados 13 años.
Pero, pese al elevado número de víctimas registradas, políticos como Abbott se niegan a restringir el acceso a las armas. Por el contrario, continúan con la tendencia de desregulación.
Por eso Texas se ha ganado -para algunos- el apodo de "paraíso de las armas".
Precisamente, allí se celebra este fin de semana la convención anual de la poderosa Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés).
Las leyes
La organización AZ Defenders, que apoya el acceso a las armas en EE.UU., afirma que, para febrero de este 2022, Texas era el décimo estado con las leyes más laxas para acceder a armas.
En Texas, los residentes pueden portar armas en público sin tener un permiso, siempre y cuando sean mayores de 21 años.
Aunque la edad mínima para comprar una pistola es 21 años, con tan solo 18 está permitido adquirir un rifle, como el AR-15 que usó Ramos en el tiroteo de la escuela de Uvalde.
La ley también permite que los jóvenes de 18 a 21 años soliciten comprar un arma de fuego a un distribuidor autorizado si se sienten amenazados, por ejemplo, por violencia familiar o acoso.
Asimismo, las empresas privadas pueden prohibir el porte de armas en sus instalaciones, pero otra ley aprobada recientemente impide que las agencias gubernamentales firmen contratos con empresas que "discriminan contra la industria de las armas de fuego".
El gobernador Abbott también firmó un proyecto que prohíbe a los funcionarios locales hacer cumplir reglas del gobierno federal que hacen más restrictivo el acceso a las armas.
Aceptación popular
Los políticos de Texas llevan años impulsado sus políticas de acceso a las armas con una amplia aceptación popular, de acuerdo con varias encuestas.
Según el Texas Politics Project, datos de febrero de 2022 mostraron que solo un 44% de los texanos apoya leyes más estrictas para restringir las armas. Un 40% está a favor de prohibir las armas semiautomáticas.
Estos números contrastan enormemente con el sentir de la población estadounidense a nivel nacional.
En 2021, el Pew Research Center señaló que un 53% de los ciudadanos estadounidenses estaba a favor de leyes más estrictas sobre las armas y un 63% se inclinó por la prohibición de las armas de asalto.
En ambos casos, hay una marcada diferencia en las opiniones basadas en la afiliación a un partido político, con los demócratas siendo más favorables a un mayor control de las armas y los republicanos en contra.
Los republicanos y las armas en Texas
La desregulación de las armas en Texas comenzó a mediados de la década de 1990, afirma la historiadora Brennan Gardner Rivas en una columna publicada en The Washington Post.
Antes de este período, indica la experta, había fuertes prohibiciones en el estado que "permanecieron en los libros durante más de un siglo".
Luego de la guerra civil estadounidense (1861-1865), para contener la violencia de grupos como el Ku Klux Klan, los legisladores texanos del Partido Republicano prohibieron las armas en lugares públicos.
Más adelante, durante un período en el que dominaron los demócratas, estos controles continuaron.
"Los tejanos que soportaron la guerra civil y sus consecuencias supusieron que menos armas en público significaban menos lápidas en el cementerio", comenta la profesora en su columna.
Pero en 1995, cuando el Partido Republicano retomó el poder en Texas bajo la gobernación de George W. Bush, quien años más tarde sería el presidente del país, se aprobó una ley que permitió portar las armas nuevamente en público, aunque ocultas.
Desde entonces, bajo la idea de que los ciudadanos pueden "protegerse mejor", sigue la flexibilización de estas leyes.
Niños con armas
En entrevista con la BBC, el texano Carlos Velásquez contó que creció cazando, rodeado de armas y de su familia.
En la conversación, ocurrida un día después del tiroteo en Uvalde, señaló que en las pequeñas ciudades del estado se les suele regalar un arma a los jóvenes cuando alcanzan la mayoría de edad.
"Cuando era niño, recuerdo a mis tíos enseñándome y entrenándome sobre cómo sostener un arma", dijo Velásquez.
El hombre viajaba desde Dallas para reunirse con un amigo de la familia que perdió a una hija durante el ataque del martes.
"La yuxtaposición de una buena seguridad con lo que acaba de suceder tiene muchos matices. No es un pensamiento claro, es una situación realmente complicada y una conversación difícil de tener ahora", indicó.
Lo sucedido esta semana marcó su perspectiva sobre las armas.
"Uvalde es un pueblo pequeño y pintoresco. El mundo no va a conocer a Uvalde por Dolph Briscoe (el 41° gobernador de Texas), ni por Los Palominos (grupo de música tejana de allí) ganador del Grammy. No van a saber de los hermosos ríos que pasan por aquí", señaló a la periodista de la BBC.
"Uvalde será conocida por sus tiroteos masivos y eso es realmente desafortunado".