El más poderoso huracán del Atlántico en una década dejó un rastro de destrucción en el Caribe y ha afectado a casi 1,2 millones de personas en las islas que arrasó a su paso.
Irma, que ahora es una depresión tropical descargando lluvias sobre los estados sureños de Estados Unidos, alcanzó una categoría 5 de huracán, con vientos sostenidos de hasta 295 km/h.
La poderosa tormenta devastó a varios países y territorios caribeños expuestos a la fuerza de sus vientos y altas marejadas, y se cobró la vida de por lo menos 47 personas (10 de ellas en Cuba).
Luego continuó hasta EE.UU. continental, pasando por Florida, Georgia y Carolina del Sur, donde se estima que causó unas diez muertes, antes de debilitarse y convertirse en depresión tropical.
Pero las islas del Caribe sufrieron el peor impacto y probablemente requerirán un enorme esfuerzo de reconstrucción.
Las imágenes que emergen de las peores áreas impactadas muestran la gravedad de los daños causados a estas comunidades isleñas.
Barbuda
El huracán Irma dejó a este territorio británico en ultramar "a duras penas habitable", según el primer ministro de Barbuda, Gaston Browne.
Algunas edificaciones quedaron completamente destruidas y la localidad de Codrington está llena de escombros.
Anguila
Anguila es otra de las pequeñas islas en las Antillas que son territorio británico. Allí, miles de personas quedaron desamparadas por la destrucción de sus casas.
Árboles cayeron o fueron completamente arrancados de raíz. Testigos vieron muchos de ellos volando por los aires.
Después de críticas contra el gobierno de Reino Unido por no haber reaccionado lo suficientemente pronto al desastre, la fuerza aérea británica realiza operativos en esta y otras islas.
Tórtola
Por lo menos cinco personas murieron en Tórtola, que forma parte de las Islas Vírgenes Británicas.
Un avión de transporte A400M de la Real Fuerza Aérea aterrizó el sábado, con decenas de soldados a bordo para dar inicio al proceso de recuperación.
El aeropuerto sufrió graves daños, pero la sala de arribos está siendo utilizada actualmente como base del operativo de recuperación.
San Martín
La isla que comprende los territorios francés de Saint-Martin y holandés de Sint-Marteen, sufrió daños amplios. Por lo menos nueve personas murieron.
El gobierno de Holanda ha desplazado 250 soldados para distribuir asistencia, alimentos, suministros médicos y materiales de construcción, así como para mantener la seguridad.
Por su parte, el primer ministro de Francia, Edouard Philippe, dijo que las autoridades en el lado francés de la isla creen que 95% de las casas han quedado afectadas y que 60% son inhabitables.
Uno de los residentes le dijo a la BBC que la isla parece haber sido impactada por una bomba nuclear, con los techos de las casas arrancados de muchos de los edificios principales, incluyendo el hospital.
San Bartolomé
Otro territorio francés en el Caribe severamente afectado fue la isla de San Bartolomé, que queda 35 km al sureste de San Martín.
Como en San Martín, la tormenta dejó calles sumergidas en bajo el agua, techos arrancados de las edificaciones y autos arrojados por el viento.
En esos dos territorios de ultramar de franceses, las muertes han subido a nueve y se informa de siete desaparecidos, según el Ministerio del Interior de Francia.
Puerto Rico, República Dominicana y Haití
Después de devastar a las pequeñas islas vecinas del Caribe y causar la muerte de al menos 28 personas, el huracán pasó rozando Puerto Rico, República Dominicana y Haití.
Estos lugares salieron comparativamente ilesos de la tormenta, una noticia particularmente positiva para Haití que todavía no se recupera de una combinación de tormentas y terremoto.
En Puerto Rico, los daños fueron menores y ahora se ha convertido en un eje para la asistencia de las islas pero afectadas.
Cuba
Pero la devastación de Irma no cesó cuando empezó a moverse a lo largo de la costa norte de Cuba.
Allí dejó a por lo menos 10 muertos y daños significativos a las comunidades costeras y los centros turísticos, interrumpiendo el flujo de energía a muchas zonas del país.
Las localidades costeras peor golpeadas en Cuba fueron Caibarién y Cojimar.
Pero el huracán no se reservó en cuanto al impacto contra la capital, La Habana, que sufrió inundaciones, destrucción de los edificios en el centro histórico y cortes de energía.
Los cayos de Florida
El sur de Florida fue donde EE.UU. sintió el primer impacto frontal del huracán, particularmente el archipiélago de pequeñas islas a ras del mar conocidas como los cayos.
El huracán continuó su paso de destrucción por todo el estado de Florida.
Después de ser degradado a depresión tropical, continúa descargando torrenciales lluvias en Georgia, Alabama y Carolina del Sur.
Algunos en EE.UU. estiman el costo de los daños en cientos de miles de millones de dólares.