Para Vladimir Putin, presidente de Rusia, la era en que Estados Unidos dominaba el mundo terminó.
El presidente ruso se presentó este viernes en un foro económico celebrado en San Petersburgo y cuestionó el poder de Washington frente a los demás países del mundo.
"Estados Unidos, tras proclamarse victorioso en la Guerra Fría, se ha declarado mensajero de Dios en el mundo. Dice que no tiene obligaciones sino solo intereses, y estos intereses, según ellos, son sagrados", cuestionó en un discurso de 73 minutos.
Y añadió: "Es como si no se dieran cuenta de que en las últimas décadas se han formado en el planeta nuevos y poderosos centros de poder que cada vez se hacen sentir más fuerte".
"Creen que la hegemonía mundial y económica de Occidente es eterna, pero no, nada lo es", dijo Putin, "los colegas de Occidente tratan de contrarrestar el rumbo de la historia pensando en términos del siglo pasado".
Para el presidente ruso, "es un error creer que durante esos cambios fundamentales alguien trate de esperar que baje la marea, que todo vuelva a la normalidad, y que todo siga siendo como antes".
"Eso no ocurrirá. Sin embargo, parece que las élites gobernantes de algunos países occidentales viven en ese mundo ilusorio, no quieren notar cosas obvias, sino se aferran obstinadamente a la sombra del pasado", sostuvo.
"Estamos hablando de procesos objetivos, de cambios verdaderamente revolucionarios, tectónicos en la geopolítica, la economía global, la esfera tecnológica, en todo el sistema de relaciones internacionales", señaló el mandatario ruso.
"Hace un año y medio, al hablar en el Foro de Davos, se volvió a insistir en que la era del orden mundial unipolar había terminado. (Esta era) ha terminado a pesar de todos los intentos de revivirla y mantenerla a toda costa", reiteró.
Sanciones "locas e irreflexivas"
Putin calificó las sanciones impuestas por Occidente a Rusia tras su invasión a Ucrania como "locas e irreflexivas", y dijo que "la guerra económica relámpago contra Rusia no tenía posibilidades de éxito desde el principio".
En su visión, las restricciones fueron "más dañinas" para quienes las impusieron que para Rusia, ya que, dijo, la Unión Europea podría perder más de US$400.000 millones como consecuencia.
Las naciones occidentales han estado buscando un equilibrio entre castigar a Rusia y proteger sus economías.
Funcionarios rusos han advertido que la economía de ese país está sufriendo graves daños por las sanciones.
La presidenta del Banco Central, Elvira Nabiullina, dijo el jueves que "el 15% del PIB del país" estaba amenazado por las sanciones internacionales.
Nabiullina también se mostró pesimista sobre las perspectivas de una recuperación inminente y les dijo a los delegados en el foro de San Petersburgo que "es obvio para todos que no será como antes".
"Las condiciones externas han cambiado durante mucho tiempo, si no para siempre", reconoció.