Tan festiva y multitudinaria es la reunión anual de Berkshire Hathaway, la compañía del multimillonario Warren Buffett, que algunos la definen como el "Woodstock para capitalistas", en referencia al famoso megafestival de música que se celebró en el estado de Nueva York en 1969.

A la ciudad de Omaha, en el centro de Estados Unidos y el lugar de nacimiento de Buffett, arribaron para pasar el fin de semana decenas de miles de accionistas de la empresa, periodistas, famosos y curiosos.

¿El principal propósito? Escuchar atentamente las palabras del gurú de las inversiones, que el próximo agosto cumplirá 88 años.

Para muchos, este encuentro es una oportunidad para aprender sobre inversiones y negocios de boca del mismísimo director general de la empresa -cuya fortuna estimada en US$86.900 millones lo convierte en el tercer hombre más rico del mundo, según la revista Forbes, pero también para compartir e intercambiar experiencias con otros accionistas.

Sus orígenes, sin embargo, fueron humildes: la primera asamblea llevada a cabo en 1982 en la cafetería de una empresa de seguros contó solo con 15 participantes.

Hoy el encuentro suma una asistencia de decenas de miles. Para esta edición se esperan más de 42.000 personas.

Muchos, con tal de conseguir un sitio privilegiado para escuchar las palabras de Buffett, hacen fila desde la madrugada para conseguir puesto.

Y quienes no pueden acudir, pueden seguir algunas de las sesiones a través de una transmisión del encuentro en vivo por internet.

Lo más destacado son las sesiones de preguntas y respuestas con Buffet y otros miembros de la empresa, como el vicepresidente, Charlie Munger, que dura hasta cinco horas.

Además, el "festival" cuenta con varias recepciones donde se ofrecen cocteles, encuentros para establecer redes de contacto y hasta una carrera de 5 kilómetros.

¿Qué perlas de sabiduría impartió el "oráculo de las inversiones" este sábado?

Comercio de EE.UU. con China

Este año, una de las primeras preguntas que le plantearon a Buffett fue sobre el comercio con China.

"Estados Unidos y China serán los dos súperpoderes económicos y en otros sentidos también, por un tiempo muy, muy, muy largo. Tenemos muchos intereses comunes, y como dos grandes entidades económicas, hay momentos en los que habrá tensiones", dijo Buffett.

"Pero es una situación en la que todos ganan cuando el mundo comercia, y China y Estados Unidos son los dos grandes factores (en este comercio)".

"El único problema es cuando un lado quiere ganar demasiado".

Futuro de la criptomoneda

Uno de los asistentes al evento le preguntó a Buffett si veía las criptomonedas como el mercado del futuro.

"Las criptomonedas acabarán muy mal", sentenció el magnate de los negocios.

Sobre la moneda que solo circula en la red, Buffett argumentó que "no son un activo productivo", refiriéndose a que su valor se fija por la cantidad que alguien esté dispuesto a pagar por ella.

El multimillonario opinó también que las criptomonedas atraías a muchos "charlatanes" y "gente de carácter menos que estelar".

A diferencia de los métodos convencionales, este dinero electrónico no necesita del respaldo del sistema bancario central o del gobierno (a excepción del petro en Venezuela).

Apple

La compañía de Buffett está aumentando su apuesta en el gigante tecnológico Apple, pese a que el empresario había rehusado en el pasado invertir en compañías del sector tecnológico al decir que "no las entendía".

El último viernes, Berkshire anunció que compró otros 75 millones de acciones de Apple, que se suman a los 165 millones que compró a finales del año pasado.

La adquisición de las acciones del viernes hizo que aumentara su valor en 4% en un solo día.

Al día siguiente y durante la conferencia, Buffett afirmó que su compañía es dueña del 5% de las acciones de Apple.

Le preguntaron qué pensaba del anuncio que hizo la fábrica del iPhone el martes pasado de una recompra de acciones por un valor de US$100.000 millones.

"Estoy encantando de verlos comprando sus acciones de nuevo", dijo.

Buffett argumentó que era el modo más productivo de usar efectivo por parte de la compañía tecnológica.

"Desde nuestro punto de vista nos encantaría que Apple bajara de precio", apuntó, y luego explicó que para los inversionistas a largo plazo es positivo cuando el precio de las acciones de una empresa baja, pues los accionistas y la compañía pueden adquirirlas por menor precio.

Wells Fargo

Otro tema que surgió en la reunión de Omaha es el escándalo que todavía azota a Wells Fargo.

Esta entidad financiera fue señalada hace dos años cuando trascendió que sus empleados abrieron millones de cuentas fantasmas sin el conocimiento de sus clientes.

En septiembre de 2016 se supo que, durante los últimos cinco años, los empleados del banco habían abierto cerca de 1,5 millones de cuentas y habían emitido alrededor de medio millón de tarjetas de crédito sin que los clientes a nombre de los cuales se suscribieron estos productos lo supieran.

Desde entonces, la entidad ha sido castigada con severas multas.

Berkshire es el principal accionista de Wells Fargo y, en varias ocasiones, Buffett manifestó su apoyo a la entidad pese a la ira de algunos de sus accionistas.

Respondiendo a la pregunta de si era tiempo de abandonar al banco, Buffett dijo que los problemas de Wells Fargo lo harían, a la larga, más fuerte.

"Todos los grandes bancos han tenido problemas de una clase u otra, y no veo una razón por la cual Wells Fargo (...) sea de ninguna manera inferior a otros grandes bancos con los que puede competir".

Buffett elogió específicamente al director ejecutivo de la entidad, Tim Sloan.

"Me gusta Tim Sloan como gerente. Está corrigiendo los errores cometidos por otra gente", aseguró Buffett.

Sucesión

En septiembre del año pasado, un analista de JP Morgan señaló que Buffett, de 87 años, no ha dado indicios que apunten a un retiro cercano.

Sin embargo, en enero de este año promovió a dos de sus hombres, Ajit Jain y Greg Abel, quienes se encargan ahora de supervisar los negocios vinculados a los seguros y a otros rubros.

Otros dos, Ted Weschler y Todd Combs, han asumido algunas de las responsabilidades del empresario.

Pero este sábado aclaró que él sigue al mando.

"Ted y Todd manejan cada uno unos US$12.000 a US$13.000 millones", dijo. "Juntos suman US$25.000 millones (...) Yo todavía tengo responsabilidad por los restantes US$300.000 millones".

Buffett ocupa el cargo de director ejecutivo de Berkshire desde hace más de 50 años y, según explica The Wall Street Journal, sus accionistas están desde hace tiempo tratando de predecir qué cambios se producirán dentro de la compañía si cambia su dirigencia.

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