Corea del Sur teme haber perdido información sumamente importante.
El martes, este país acusó a Corea del Norte de robarle una gran cantidad de documentos militares.
Lee Cheol-hee, legislador surcoreano, dijo que la información provenía del Ministerio de Defensa.
Los documentos comprometidos, que se creen fueron hackeados, incluyen planes de contingencia en caso de guerra elaborados por EE.UU. y Corea del Sur.
Se cree que los hackers también obtuvieron informes dirigidos a los altos mandos de ambos aliados.
Además, entre la información, hay un plan para asesinar al líder del vecino del norte, Kim Jong-un.
Dijo que unos 235 gigabytes de documentos militares habían sido robados del Centro de Datos Integrados de Defensa, y que el 80% de ellos todavía no han sido identificados.
Se cree que el hackeo ocurrió en septiembre de 2016.
Robo de datos
El parlamentario Lee informó que Corea del Norte accedió a planes para las fuerzas especiales del Sur, junto con información sobre sus centrales energéticas e instalaciones militares más importantes.
Hasta ahora, el Ministerio de Defensa de Corea del Sur se ha negado a pronunciarse sobre la situación.
Según Lee, se trata de los planes operativos 5015 and 3100, informó la agencia surcoreana de noticias, Yonhap.
El plan 5015 contendría detalles para acabar con Kim Jong-un y el 3100, "para que Seúl responda a las provocaciones de Pyongyang", dice Yonhap.
El legislador Lee pertenece al partido gobernante de Corea del Sur y al Comité de Defensa del congreso.
Dijo que unos 235 gigabytes de documentos militares habían sido robados del Centro de Datos Integrados de Defensa, y que el 80% de ellos todavía no han sido identificados.
En mayo, Corea del Sur dijo que le habían robado una gran cantidad de datos a través de un ataque cibernético que pudo haber sido instigado por Corea del Norte.
Pero no dio detalles de lo que se llevaron.
Corea del Norte negó la acusación.
La agencia Yonhap informa que Seúl ha estado sometida a una avalancha de ataques cibernéticos por parte de su vecino comunista en los últimos años, muchos de los cuales tienen como objetivo sitios web e instalaciones gubernamentales.
Se cree que el estado aislado tiene hackers especialmente entrenados en el extranjero, incluso en China.
Corea del Norte ha acusado a Corea del Sur de "fabricar" estas acusaciones.
Tensión álgida
La noticia de que Pyongyang probablemente haya tenido acceso a los planes de Seúl y Washington para una guerra en la península coreana no servirá para calmar las tensiones entre EE.UU. y Corea del Norte.
La tensión retórica entre ambas naciones ha venido aumentando en los últimos meses a causa de las actividades nucleares del norte.
EE.UU. presiona para detener las pruebas de misiles, pero Pyongyang promete seguir con ellas.
A inicios de setiembre, Corea del Norte afirmó haber probado con éxito una bomba miniaturizada de hidrógeno, que podría cargarse en un misil de largo alcance.
En un discurso ante la ONU en septiembre, el presidente estadounidense, Donald Trump, amenazó con destruir a Corea del Norte si amenazaba a EE.UU. o a sus aliados y dijo que su líder "está en una misión suicida".
Como respuesta, Kim Jong-un prometió "domesticar con fuego al viejo mentalmente desquiciado".
El fin de semana, Trump lanzó un tuit críptico: advirtió que después de 25 años de conversaciones, "sólo una cosa funcionará" con Corea del Norte, pero no especificó cuál.