La magnitud del derrumbe del volcán indonesio que generó el devastador tsunami del sábado pasado en el estrecho de la Sonda se está haciendo evidente.

Los investigadores examinaron imágenes satelitales de Anak Krakatau para calcular la cantidad de roca y ceniza que se desprendieron al mar.

Dicen que el volcán ha perdido más de dos tercios de su altura y volumen durante la semana pasada.

Gran parte de esa masa perdida podría haberse deslizado hacia el mar en un solo movimiento.

Eso, sin duda, explicaría el desplazamiento del agua y la generación de olas de hasta 5 metros de altura, que luego golpearon las costas cercanas de Java y Sumatra.

La agencia de desastres de Indonesia confirmó que más de 400 personas murieron y alrededor de 20 permanecen desaparecidas. Más de 40.000 fueron desplazadas.

https://twitter.com/Sutopo_PN/status/1078661984277585920


El Centro de Vulcanología y Mitigación de Riesgos Geológicos (PVMBG) ha estado estudiando imágenes satelitales y de radar.

El radar tiene la ventaja de permitir ver el suelo día y noche, y poder tomar imágenes a través de las nubes.

Esa capacidad permitió realizar algunas mediciones iniciales de la altura perdida deñ Anak Krakatoa, en particular en su lado occidental.

Lo que una vez fue un cono volcánico de unos 340 metros de altura ahora tiene solo 110 metros de altura, según el PVMBG.

En términos de volumen, perdió entre 150 y 170 millones de metros cúbicos de material, quedando solo con entre 40 y 70 millones de metros cúbicos.

Aún no está claro cuánta masa se perdió el 22 de diciembre y cuanta en los días siguientes.

Los científicos tendrán una idea más aproximada una vez que puedan visitar el volcán y realizar estudios más extensos. Pero con las erupciones aún en curso y el establecimiento de una zona de exclusión de seguridad, nadie se puede acercar al Anak Krakatoa.

El derrumbe del volcán y la generación de un tsunami ya era considerado un peligro potencial antes del sábado pasado.

Los científicos habían modelado esa posibilidad hace seis años, incluso identificando el flanco occidental de Anak Krakatau como la sección del volcán con mayor probabilidad de caer.

El estudio, aunque simulaba un evento más grande, predecía una altura para las olas y unos tiempos de inundación costera notablemente similares a lo que realmente sucedió.

En agosto de 1883, el Krakatoa registró una de las erupciones volcánicas más violentas de las que se tenga registro en la historia. Tsunamis masivos con olas de hasta 41 metros mataron a más de 30.000 personas.

Indonesia se encuentra en el Anillo de Fuego, la línea de frecuentes terremotos y erupciones volcánicas que rodea virtualmente todo el borde del Pacífico.

En septiembre, más de 2.000 personas murieron cuando se produjo un poderoso terremoto cerca de la isla de Sulawesi, en el centro de Indonesia, que provocó un tsunami que asoló la ciudad costera de Palu.

 

Publicidad