Las fuerzas azerbaiyanas derribaron por error este lunes un helicóptero militar ruso cerca de sus fronteras, pero en territorio de Armenia, un incidente que puede involucrar más a Moscú en el conflicto en Nagorno Karabaj, en el que se enfrentan Armenia y Azerbaiyán.
Según el ministerio de Defensa ruso, dos miembros de la tripulación murieron y una tercera persona resultó herida y fue evacuada.
"El helicóptero Mi-24 fue blanco de disparos desde el suelo mediante un sistema portátil de defensa aérea", indicó el ministerio ruso de Defensa en un comunicado.
Poco después Azerbaiyán admitió su responsabilidad y pidió "disculpas a Rusia tras este incidente trágico, que fue un accidente".
El ministerio azerbaiyano de Relaciones Exteriores explicó que una unidad del ejército creyó que se trataba de una "provocación de la parte armenia", en pleno conflicto en Nagorno Karabaj. También mencionó una mala visibilidad para justificar el accidente, que se produjo no lejos de la zona de los combates.
Las fuerzas armadas de Azerbaiyán y los separatistas armenios se enfrentan desde finales de septiembre por el control de Nagorno Karabaj, región secesionista apoyada por Armenia, que escapa al control de Azerbaiyán desde los años 90, tras una guerra que dejó 30.000 muertos.
Rusia, aliada militar de Armenia, también tiene buenas relaciones con Azerbaiyán y sus autoridades han dado a entender que solo intervendrán en el conflicto en Karabaj si traspasa los límites del enclave.
Moscú siempre ha instado a un alto el fuego, al igual que la inmensa mayoría de la comunidad internacional, pero hasta ahora tres treguas han fracasado desde finales de septiembre.
Turquía, la otra potencia regional, apoya a Azerbaiyán, y fue acusada de enviar a mercenarios proturcos de Siria a luchar con las fuerzas de Bakú.
Pese a esta rivalidad, los Presidentes ruso, Vladimir Putin, y turco, Recep Tayyip Erdogan, mantienen una relación pragmática sobre Karabaj.
Batalla por Shusha
Antes el incidente del helicóptero ruso, Armenia afirmó que los combates continuaban por el control de la ciudad estratégica de Shusha, que Azerbaiyán anunció haber capturado el fin de semana. Pero las informaciones sobre la situación de esta localidad no son claras.
Según un comunicado difundido por el centro de prensa de las fuerzas armenias, "tuvieron lugar combates intensos" estos dos últimos días en la región de Shusha contra las tropas azerbaiyanas, que "sufrieron pérdidas considerables y se retiraron".
La víspera, Armenia desmintió que esa ciudad estratégica hubiera caído en manos de Azerbaiyán, asegurando que resistiría "a los golpes del enemigo a pesar de las fuertes destrucciones".
"La batalla por Shusha continúa", declaró el primer ministro armenio, Nikol Pashinyan este lunes en Facebook, utilizando el topónimo armenio de la ciudad.
Poco antes, un portavoz de la presidencia de la república autoproclamada de Nagorno Karabaj había anunciado en Facebook que Shusha ya no estaba bajo control armenio y que "el enemigo se acerca a Stepanakert", la capital de la región.
Shusha está situada en lo alto de una montaña, que le sirve de fortaleza natural, a unos 15 kilómetros de Stepanakert, la capital de Nagorno Karabaj, y en la carretera principal que lleva al territorio de Armenia.
Además de su situación estratégica, la localidad es un símbolo para los azerbaiyanos, que la consideran como uno de sus principales centros culturales. Los armenios la consideran parte de su patrimonio, especialmente su catedral.
Una derrota militar en Nagorno Karabaj también podría amenazar el futuro del primer ministro armenio, que llegó al poder tras una revuelta popular en 2018.
Diecisiete partidos de oposición pidieron el lunes la dimisión de Pashinyan y de todo su gobierno, debido a este conflicto.
Los combates en esta región ya han dejado casi 1.300 muertos desde septiembre, entre ellos 44 militares separatistas el lunes. Pero es un balance parcial ya que Azerbaiyán, desde el inicio del conflicto, no anuncia sus pérdidas militares.
El lunes, las fuerzas separatistas mencionaron bombardeos azerbaiyanos en varias localidades bajo su control, entre ellas Stepanakert. El ejército azerbaiyano señaló disparos armenios en varias localidades. Azerbaiyán pide una retirada total de las fuerzas armenias para poner punto final a su ofensiva.