Tras el ataque en Virginia en medio de una transmisión en vivo del canal estadounidense WDBJ7, la estación de noticias continuó reporteando hasta que terminó por confirmar la muerte de dos de sus integrantes: la reportera Alison Parker y el camarógrafo Adam Ward.
Poco después el presidente de WDBJ7, Jeff Marks, participó de un diálogo al aire con otros integrantes del canal, en que comentaron el ataque.
Marks aseguró que tras el ataque el equipo continúo reporteando para ayudar a la policía a dar con el sospechoso, cuya identidad y motivaciones aún se desconocen.
“No sabemos el motivo, no sabemos quién es el sospechoso o el asesino, sabemos que la policía está trabajando para rastrear la razón y a la persona responsable por este terrible crimen”, dijo.
Marks dijo que tanto Parks como Ward estaban en una relación con otros integrantes del equipo. Parks hace poco se había ido a vivir con Chris Hurst, mientras que Ward recientemente se había comprometido con una productora.
Además, dijo que en respeto por la familia y los integrantes del canal, no mostrarían más el video del ataque.
“Decidimos no mostrar más ese video, no necesitamos verlo de nuevo y definitivamente nuestro staff no necesita verlo de nuevo. Pero haremos un reporte completo luego, nuestro equipo está trabajando en lágrimas para llegar al final de esto”.