DW: La canciller alemana, Angela Merkel, ya es bastante famosa. ¿Para qué publicar este libro?
Andreas Rinke: El mundo necesita este libro porque entrega un enfoque completamente diferente al político y porque quizás puede aclararle a la gente quién es la persona detrás de Merkel. Hay una serie de biografías sobre ella, pero como hemos visto en el último tiempo todavía hay muchas conjeturas sobre qué impulsa a esta mujer y por qué actúa como actúa. Esto lo ha evidenciado la crisis e los refugiados.
¿Y entonces, qué impulsa a Merkel, la mujer?
Cuando nos fijamos en la crisis de los refugiados, hay dos o tres fuerzas motrices que han determinado su posición: por un lado el deseo de mantener Europa unida. A todos les gusta decidir por sí mismos, más allá de si fracasan o tienen éxito. Merkel decidió no cerrar las fronteras porque cree que se puede producir un efecto dominó en Europa si el Estado más grande cierra sus fronteras.
El segundo motor es, sin duda, la formación cristiana que trae de la casa de sus padres y la conciencia de integrar al otro. Desde temprano mostró que tiene una responsabilidad humanitaria. Ya en los años 90, cuando se admitió a los refugiados de la guerra de Yugoslavia. Al igual que lo ha dicho ahora, que es sólo una ayuda temporal, pero que los países ricos como Alemania y la Unión Europea en conjunto deben ofrecer ayuda. Luego se añade, ciertamente, su experiencia en la DDR, y la ayuda que le proporcionó Alemania Occidental al país. Y que el aislamiento y ponerles fronteras a las personas finalmente no impiden que ellas vayan donde quieran ir.
Las palabras claves en el libro serían A de aislamiento y Z de Zeit ("tiempo" en alemán). ¿Cuál de estos términos define mejor a Angela Merkel como persona?
Es difícil de decir, no hay una única palabra para definirla. El libro propone justamente definirla con la combinación de las más de 300 palabras que aparecen dentro, porque como observadores y periodistas nunca podemos describir por completo a las personas. Nosotros sólo observamos desde una distancia relativa. Si la describo como líder de la CDU y como canciller, es en última instancia una aproximación. La idea básica del libro fue la posibilidad de ensamblar muchos aspectos individuales para crear una imagen completa.
Yo lo encuentro fascinante: después de once años de gobierno con esta canciller, asume comportamientos contradictorios y diferentes. Esto es en parte bienvenido y en parte criticado. Se le percibe como cambiante e indecisa, luego continúa como terca y mujer de principios. Esa imagen se ha formado en el último año debido a la crisis de los refugiados. Lo que me atrajo era aclarar que en Merkel se pueden encontrar todos los elementos políticos de su actuar. Depende de cada caso como ella gobierne, según cómo esté el entorno político, mundial y europeo. El aspecto europeo ha sido crucial en todas las decisiones de Angela Merkel en estos once años como canciller.
Para Google la última búsqueda frecuente sobre la canciller fue "¿quién es Angela Merkel?". ¿Cuál sería su respuesta?
(Risas) He tratado de envolver esa respuesta en 400 páginas. Angela Merkel es una política muy compleja, con muchos aspectos individuales, con un fuerte apremio por la organización y el poder. Por ello no hay contraste con su predecesor, Gerhard Schröder, porque ambos actúan de forma humanitaria y, al mismo tiempo, son políticos poderosos. Sólo en el poder existe la oportunidad de que algo cambie.