El embajador de China en el Reino Unido, Liu Xiaoming, instó este sábado al Gobierno británico a renunciar a su proyecto de desplegar un portaaviones en el Pacífico, destacando que se trataría de un "paso muy peligroso" que podría agravar las ya tensas relaciones entre ambos países.
"China tiene un derecho legítimo de defender su soberanía e integridad territorial. Nuestros derechos son reconocidos por la ley internacional. Estados Unidos se mantiene enviando navíos desde EE.UU. hasta el mar del sur de China solo para provocar, infringir y pisotear la soberanía de China”, dijo Xiaoming a la prensa local y posteriormente lo publicó en su red de Twitter.
El funcionario agregó que "no quisiera que el Reino Unido se uniera a Estados Unidos para retar la soberanía de China e interrumpir la estabilidad y tranquilidad de la región. Espero que Gran Bretaña después del Brexit juegue un papel para la paz y no para crear problemas”.
La prensa local indicó esta semana que el Reino Unido estaba considerando la posibilidad de enviar al HMS Queen Elizabeth "al Lejano Oriente" como parte de una alianza internacional para contrarrestar a China. El portaaviones participaría en ejercicios militares con Japón y Estados Unidos.
Las relaciones entre Pekín y Londres se han tensado desde que China impuso su Ley de Seguridad Nacional en Hong Kong y el Reino Unido excluyó a la empresa china de las telecomunicaciones Huawei de su red 5G, después de meses de presión desde Estados Unidos.
El Reino Unido denunció como una "violación manifiesta" de la autonomía de Hong Kong la Ley de Seguridad Nacional impuesta por China a la antigua colonia británica, que prevé el castigo de las actividades separatistas, la subversión y la injerencia extranjera en el territorio autónomo de China.
En respuesta, Londres prometió ampliar los derechos de inmigración y -en última instancia, el acceso a la ciudadanía británica- para millones de habitantes del territorio, una medida que Pekín denuncia como una "injerencia grosera" en sus asuntos internos.