Una transcripción de la grabación de audio de los últimos momentos de vida de Jamal Khashoggi confirma que la muerte del periodista árabe en el consulado saudí de Estambul habría sido un plan premeditado para asesinarlo y que sus últimas palabras habrían sido “no puedo respirar”.
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Según constata una fuente anónima del medio CNN que leyó la transcripción hecha por Servicios de inteligencia turcos, en los últimos momentos del periodista se puede escuchar a un grupo de personas decididas a matarlo.
En el audio de la muerte de Khashoggi, ocurrida el 2 de octubre de este año, se puede diferenciar el sonido de su cuerpo siendo desmembrado por lo que sería una sierra y, además, la indicación de que los presuntos autores escuchen música para bloquear ese ruido.
Según la misma fuente, el audio sugiere que se hicieron una serie de llamadas telefónicas para informar sobre el progreso de la tortura.
Esta nueva información amenaza con desmentir un punto clave de la explicación saudí inicial de la muerte de Khashogui, donde aseguraron que solo se había tratado de "una operación deshonesta que salió terriblemente mal" y no de un asesinato premeditado.
El medio CNN solicitó a los funcionarios del servicio de inteligencia saudí que comenten el contenido de la transcripción y proporcionen estos nuevos comentarios que figuran en ella.
"Los funcionarios de seguridad sauditas pertinentes han revisado la transcripción y los materiales de cinta a través de los canales de seguridad turcos y en ninguna parte de ellos hay ninguna referencia o indicación de que se haya realizado una llamada", respondió un miembro del servicio de inteligencia.
Cabe recordar que esta no es la única "confirmación" que se ha hecho sobre la tortura y asesinato de Khashoggi. Según indicó el diario turco Sabah, los asesinos se deshicieron de su cuerpo echándolo por el sistema de desagüe después de haberlo disuelto en ácido.
