En el apogeo de la Guerra Fría, dos superpotencias competían por poner a su hombre en la Luna. Sin embargo, antes del histórico «un pequeño paso para el hombre» hubo un gran salto en los vuelos espaciales.

Fue una misión audaz, una que terminaría en desastre para un valiente cosmonauta.

Esta es la historia de Vladimir Komarov, el hombre que cayó a la Tierra.

Komarov era el hijo de un obrero y había nacido en Moscú en 1927.

A una edad temprana, mostró un talento natural para las matemáticas y un gran interés en la aviación.

Tras graduarse de la escuela de vuelo, se convirtió en uno de los mejores pilotos de pruebas de la Unión Soviética.

"Para los soviéticos, Komarov era perfecto", dice Richard Hollingham, escritor científico y copresentador del podcast "Space Boffins".

"Era un gran piloto y muy patriótico; probablemente por eso fue seleccionado para dos misiones espaciales realmente prestigiosas".

El primer vuelo

Durante la década de 1960, las hostilidades entre Estados Unidos y la URSS estaban en su punto de ebullición.

A medida que la tecnología de la aviación continuaba avanzando, en lo que se conoció como la carrera espacial, las dos superpotencias pujaban por ser las primeras en llegar a la Luna.

Laika, el primer ser vivo en ir al espacio... y no regresar.

"Desde el principio, los soviéticos eran los primeros en casi todo.

"La Unión Soviética puso al Sputnik en órbita, el primer satélite; envió a un perro a la órbita, Laika; mientras que EE.UU. parecía estar rezagado todo el tiempo.

Cosmonautas como Komarov y el primer hombre en el espacio, Yuri Gagarin, recibían un entrenamiento altamente intensivo.

"Los metían en cámaras de aislamiento. Los hacían girar a fuerzas g altísimas. Hasta los abandonaron en un bosque con solo un hacha y algunos fósforos para ver cómo sobrevivían en el desierto si su nave espacial se desviaba de su curso", cuenta Hollingham.

En 1964, Komarov completó con éxito su primer viaje espacial, Voskhod 1.

"Esa fue la primera nave espacial de tres hombres.

Estampilla conmemorativa de Voskhod 1 con los cosmonautas Vladimir Mikhaylovich Komarov, Konstantin Petrovich Feoktistov y Boris Borisovich Yegorov.

"La historia apócrifa sobre Voskhod 1 es que el ingeniero que trabajó en él también fue asignado para ser miembro de la tripulación para reparar cualquier problema pues su vida dependería de hacerlo bien".

Soyuz y Apolo

Un día después del histórico vuelo de Komarov, Leonard Brezhnev fue elegido presidente del Partido Comunista y se puso en marcha un nuevo y ambicioso plan: el programa espacial Soyuz.

"Era una misión osada. Iban a lanzar una nave, que pondría a Komarov en órbita, y luego otra con dos tripulantes a bordo.

"Iban a reunirse y atracar en órbita, Komarov iba a transferirse a la otra nave espacial y regresarían a la Tierra en esa".

Pero, a medida que se acercaba la fecha de lanzamiento, quedó claro que Soyuz 1 estaba plagada de fallas.

"En 1967 el programa era un desastre, y no había forma de que se permitiera volar en esas naves espaciales, pero hubo una enorme presión política en el 50° aniversario de la Revolución Rusa para que esta nave espacial despegara".

Paralelamente, "en EE.UU. estaba sucediendo exactamente lo mismo con Apolo", subraya Hollingham.

"He hablado con muchos de los ingenieros que trabajaron en Apolo y me han dicho que sabían que la nave espacial Apolo 1 no estaba lista.

"Sin embargo, metieron a 3 astronautas en el Apolo 1 en la plataforma de lanzamiento, se incendió y murieron".

A pesar de las crecientes preocupaciones, Soyuz 1 se lanzó con éxito el 23 de abril de 1967.

Krasnoznamensk, tenemos un problema

"Komarov supo apenas despegó que la nave espacial tenía problemas.

"Una vez en órbita, las cosas empezaron a fallar. Uno de los paneles solares que proporcionaban energía a la nave espacial no se desplegó, lo que le dio una instrumentación muy limitada".

Con innumerables problemas a bordo de Soyuz 1, el plan para el lanzamiento de Soyuz 2 fue cancelado y Komarov recibió la orden de intentar reingresar a la atmósfera terrestre.

"Parecía que iba a poder regresar tras esa desastrosa misión pero los paracaídas fallaron y se estrelló de regreso a la Tierra.

"Probablemente murió en el camino de regreso sólo por la fuerza g.

"Cuando golpeó el suelo, la nave espacial se incendió debido a una falla en los retrocohetes".

Mitos

A menudo se afirma que durante la reentrada Komarov estaba en comunicación con el control terrestre, transmitiendo mensajes altamente críticos, pero Hollingham lo duda.

El plan era que Komarov pasara de una nave a la otra en el espacio.

"Esa versión de que está maldiciendo a la Unión Soviética, que está diciendo que las lecciones se pueden aprender, para mí es muypoco probable.

"En primer lugar, no se habría podido escuchar eso, principalmente porque estaba cruzando a través de la atmósfera.

"Y en segundo lugar, cuando se dio cuenta de que algo iba mal, se estaba precipitando demasiado rápido hacia la Tierra".

Los restos de Komarov también son un punto de discusión.

"Hay varias versiones de lo que sucedió con los restos de Komarov. Una es que su cuerpo fue exhibido para que todos pudieran ver lo que sucedió. Hay fotos que lo demuestran".

Se ha dicho que Komarov probablemente sabía que no volvería con vida y exigió que, en caso de su muerte, su cuerpo se exhibiera en un ataúd abierto para avergonzar a los líderes soviéticos.

"No hay evidencia de que eso hubiera sido lo que estaba pensando. Komarov era un ciudadano soviético patriótico. No creo que hubiera querido que su muerte fuera una victoria propagandística para el otro lado".

Komarov murió a los 40 años.

El 26 de abril de 1967, después de un funeral de Estado en la Plaza Roja de Moscú, los restos de Komarov fueron enterrados en la Necrópolis de la Muralla del Kremlin.

"Para mí, 1967 es realmente un año crucial en la carrera espacial.

"En enero sucedió la pérdida de tres astronautas en el incendio del Apolo 1 y, luego, tienes la de Komarov en Soyuz 1, el primer hombre en perder la vida en el espacio.

"Ambas partes tuvieron que hacer un alto, reflexionar y volver al punto de partida".

El nombre de Vladimir Komarov es uno de los de 6 cosmonautas y 8 astronautas que figuran en la placa que acompaña la escultura "El astronauta caído" del artista belga Paul Van Hoeydonck, dejada en la Luna por la tripulación de Apolo 15 en 1971.

Un tributo entre las estrellas para el hombre que cayó a la Tierra.

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